Edificant se convierte en 'Reparant'
La mayoría de las actuaciones del plan para dignificar los centros escolares no pasan del millón de euros y abundan las obras menores, como las destinadas a la accesibilidad o la climatización
El plan Edificant impulsado por la Conselleria de Educación cumple cuatro años y suma 634 obras delegadas a los ayuntamientos, cuyos recursos humanos asumen toda la tramitación necesaria para sacarlas adelante, siendo la Generalitat la que aporta los fondos necesarios.
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El programa fue concebido como una aceleradora de obra pública que dignificase las infraestructuras de la Generalitat, y aunque su nombre se asocie a la construcción de centros nuevos, a grandes ampliaciones o reformas, lo cierto es que se centra más en acometer reparaciones y mejoras de todo tipo.
El 64,5% del total tienen una inversión prevista inferior al millón de euros -el 50,1% están por debajo de los 500.000-, y 311 -de las 634- son intervenciones que incluyen al menos una ampliación o nueva construcción de instalaciones, ya sea un aula, un despacho, un gimnasio o unos baños, además de las grandes intervenciones que suman varios millones de euros, muchas de las cuales ya figuraban en el listado de obras prioritarias que el Botánico presentó en 2016 y que prometió para mediados de 2019.
Las otras 323 -la mitad- se centran en mejoras y reparaciones que sin duda son importantes pero que no tienen la entidad suficiente para ser clasificadas como las grandes obras con las que se suele asociar el plan de cooperación. Abundan las intervenciones de accesibilidad y climatización, las adecuaciones en patios, vallados y cubiertas y las renovaciones de sistemas eléctricos, por citar algunos ejemplos.
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Edificant bien podría llamarse ‘Reparant’, denominación acuñada por Carlos Gracia, el diputado de Ciudadanos que formuló la petición de documentación que ha derivado en la respuesta parlamentaria de la que se desprende toda esta información. Más allá de las notas de prensa que periódicamente envía la conselleria -y que suelen destacar las intervenciones más grandes, como nuevas edificaciones, reposiciones o ampliaciones- es la primera vez que trasciende un listado completo de las actuaciones delegadas, lo que ayuda a tener una visión de conjunto.
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Una de las conclusiones que se debe extraer es la cantidad de trabajo pendiente en la mejora de las infraestructuras públicas, las que acogen a la gran mayoría del alumnado y el profesorado valenciano. Que el plan incluya 634 actuaciones (a 1 de octubre, cuando se firma la respuesta) no significa necesariamente que estén realizadas o en ejecución, sino que el ayuntamiento ya tiene vía libre para tramitarlas y que su financiación estará disponible cuando sea necesario pagarlas.
De hecho el grado de materialización de la inversión -que también se solicitó aunque no se incluyó en la respuesta parlamentaria- es más bien discreto, según la información que publica el Portal de Transparencia de la Generalitat sobre pagos presupuestarios. Como recuerda Ciudadanos y ya publicó LAS PROVINCIAS, el dinero efectivamente abonado a las empresas contratadas a través de Edificant se eleva a 129,6 millones de los 1.008 presupuestados desde 2018, un 13%. Si se toma como referencia el importe global de las 634 obras delegadas (925,3), el porcentaje crece hasta el 14%.
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Grado de ejecución
«Tras cuatro años se demuestra que Edificant es totalmente ineficaz y su ejecución presupuestaria ridícula: de los más de mil millones previstos sólo se ha gastado un 13%», denuncia la síndica de Ciudadanos, Ruth Merino. «Marzà utilizaba como argumento, cuando presentó el plan, las numerosas actuaciones prioritarias que iban a acometer, y a fecha de hoy solo se ha construido uno de cada cuatro colegios. Más de 87 centros urgentes siguen en el limbo, perdidos en la burocracia del Botánico», añade, en referencia al listado de obras prioritarias de 2016.
«Además la letra pequeña de Edificant revela que más de la mitad de las actuaciones delegadas son en realidad para actuaciones menores como reparar fachadas, aseos, cambio de ventanas... y ni siquiera para estas funciona a juzgar por la ejecución presupuestaria. Estamos ante un plan que ni construye colegios ni saca a los niños de los barracones», concluye la diputada.
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