Mendes ya hace negocio

Se acerca el cierre de mercado y Jorge Mendes vuelve a frotarse las manos. No es que el agente portugués necesite hacer operaciones en esta pandemia para llegar a final de mes o para sostener su empresa (la lista Forbes le dio a Gestifute unos beneficios el año pasado de 101 millones de dólares), pero todos los que conocen de cerca a Mendes no dudan a la hora de calificar su obsesión por el trabajo y es durante estos días cuando más exprime su oficina. Su trabajo es precisamente encajar a sus representados, función que le supone un 10% aproximado de comisión.

Es el segundo representante más rico del mundo y el principal consejero de Peter Lim, el hombre en el que Meriton depositó su confianza nada más aterrizar en Mestalla para que, desde la distancia, asesorara en la construcción del nuevo Valencia. Estuvo presente en una famosa reunión en las instalaciones de Power (Amadeo Salvo).

Pendiente como está el Valencia de solucionar en medio del ruido mediático y el clamor popular sus problemas en defensa y en el medio del campo, ayer se supo que Mendes había hecho lo más difícil, o lo más fácil según se mire. Ha cogido a Ruben Dias del Benfica y se lo ha llevado al Manchester City, y de allí se ha llevado a Nicolás Otamendi al conjunto portugués. Operación redonda porque el trueque no es un simple cambio de cromos. Hay una operación de compra-venta y, por añadidura, la comisión pertinente para Gestifute.

Según informó el Benfica a la Comisión del Mercado de Valores Mobiliarios de Portugal, Ruben Dias –joven central– será transferido al conjunto que dirige Pep Guardiola por 68 millones de euros. El Benfica aclara que habrá otros 3,6 millones de euros en variables.

Por su parte, Otamendi, central de 32 años que ya conoce la Liga de Portugal porque en 2014 militó en el Oporto y que en su momento estuvo a punto de regresar de nuevo al Valencia, vestirá los colores de Benfica. La operación supondrá un desembolso de 15 millones de euros.

A Javi Gracia, estos movimientos le deben provocar cierta envidia. Es evidente que desde el punto de vista económico, el Valencia está a un nivel muy lejos de las cifras que han manejado City y Benfica, pero es precisamente la posición de central, al margen del centrocampista, la que continúa quitándole el sueño al técnico blanquinegro.

Al margen de que el club sigue en el tira y afloja con el Watford para hacerse con Capoue para el centro del campo, ayer la Cadena Cope apuntó otro nombre para reforzar la defensa. En este caso se trata de Daniele Rugani, italiano de 26 años de cierta envergadura física (1,90 m) y que milita en la Juventus, donde el año pasado tan sólo disputó 11 encuentros como titular. Rugani forma parte de una lista en la que también, entre otros, se encuentra el argentino Juan Marcos Foyth, un jugador de 22 años que defiende los colores del Tottenham. Lleva el Valencia tiempo limando las operaciones porque tiene que conseguir que sus equipos de origen acepten la cesión, la única fórmula autorizada por Lim aunque con ciertos márgenes.