Desconchados en el pavimento, la última chapuza del parking de la plaza de la Reina

La segunda de las plantas vuelve a ser de nuevo la más castigada por la proliferación de desconchones del pavimento de las dos de las que está equipado el aparcamiento. En algunos de los agujeros se aprecia el material que hay debajo del revestimiento mientras que otros han sido tapados con una cinta gris, acorde con una de las tonalidades del suelo con las que se trata de disimular su deplorable estado. Más que ocultar los daños, las tiras adhesivas provocan una especie de 'efecto Streisand', ese fenómeno en el que se intenta esconder algo mediante algún método que finalmente resulta ser contraproducente y sea lo que sea acaba resultando ser más conocido que si no se hubiese hecho nada para ocultarlo.

Sin embargo, en esta ocasión no es así. El Ayuntamiento ya tiene listo un contrato menor con el que abordar este asunto y reponer los desconchones mediante un nuevo revestimiento de resina diferente al que se ha utilizado hasta la fecha. Lo cierto es que la corta periodicidad con la que se suceden este tipo de desperfectos desconcierta incluso a los técnicos encargados del mantenimiento del parking que no tienen claro cuál ha podido ser la causa de los daños en el suelo del estacionamiento.

Pese a no conocerse los orígenes de este fenómeno tan recurrente en las catacumbas de la plaza de la Reina, la glorieta y en parte su aparcamiento volvieron a ser protagonistas, para mal, hace unos días, concretamente el pasado fin de semana.

Según los datos de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), el domingo 27 de julio se registraron las temperaturas más altas vistas en la ciudad desde el pasado 10 de agosto de 2023, cuando Valencia hirvió más que nunca después de que el mercurio alcanzara los 44,5 grados. Bien, pues a las 15.30 de hace cinco días los termómetros marcaron los 38,4 grados, sólo se ha reportado este calor en la capital del Turia en 17 ocasiones anteriores, y una avería en forma de filtración de agua al parking dejó fuera de servicio los aspersores de agua de la zona ajardinada de la glorieta. En definitiva, este incidente convirtió al 'oasis', cuyos dispensadores servían de refresco para muchos, en un secarral durante las horas más tórridas de los últimos dos veranos.

Afortunadamente, el trabajo de los operarios hizo que se pudiera recuperar el suministro antes de las 18.00 horas de la tarde cuando los termómetros seguían rebasando de manera holgada los 30 grados.

Este diario ya recordó la instantánea de verano de 2022 cuando se produjo la inauguración del aparcamiento y su reforma en la que estuvieron presentes el entonces alcalde Joan Ribó escudado por el concejal de Movilidad y presidente de la EMT, Giuseppe Grezzi. Ambos pesos pesados del gobierno municipal del Rialto hicieron un recorrido triunfal en la visita que sirvió como acto inaugural del estacionamiento que demostró sus carencias menos de un año después de haberse abierto al público.

En agosto de 2023, este periódico publicaba el contenido de una carta remitida por Nacho Climent, el director de Aparcamientos de la EMT, a los usuarios de esa segunda planta del parking advirtiéndoles de que el pavimento del sótano «presenta un deterioro significativo, debido a un defecto de los materiales utilizados o a una mala ejecución de los trabajos durante la rehabilitación del aparcamiento».

«Es la intención de EMT, como gestora de estas instalaciones, reparar todos los desperfectos que puedan existir ahora y los que vayan surgiendo en un el futuro, para garantizar la prestación del servicio en óptimas condiciones. Por dicho motivo, durante el mes de agosto se ha programado 3 fases de intervención para reparación del suelo de la citada planta P-2», explicó Climent a los asiduos a aparcar sus vehículos allí antes de pedir disculpas por el poco tiempo de antelación otorgado.

Tras dos semanas de trabajos, en agosto de 2023 el aparcamiento de los líos volvió a estar operativo después de que el Consistorio, ya con el actual equipo de gobierno al frente, llevase a cabo las obras de urgencia en la segunda planta y detectar problemas en el primer subsuelo. Asimismo, desde la nueva Concejalía de Movilidad se impulsó un estudio sobre el estado del pavimento al sospechar que en algunos puntos del aparcamiento la capa de revestimiento utilizada era demasiado delgada.

La empresa concesionaria se vio obligada a cerrar parcialmente el parking para proceder al arreglo de los desperfectos localizados en el firme de la segunda planta. Tal como aseguró el Ayuntamiento, el coste de las obras corrió a cuenta de la empresa y, por tanto, no supuso un desembolso para las arcas municipales.

El parking de la plaza de la Reina es gestionado, a través de una empresa concesionaria, por la Empresa Municipal de Transportes (EMT). Con motivo de la peatonalización de la plaza, fue reformado por completo y cuenta en la actualidad con una capacidad para 228 plazas de automóvil, siete de ellas en recarga eléctrica, seis plazas para personas con movilidad reducida, 48 para motocicletas y 20 para bicicletas.