Frolik, la revolución del running que busca conectar personas
El runclub nacido hace apenas un año en Valencia cuenta con una comunidad de más de 1.000 personas
Seguro que la palabra runclub os suena. Según algunas informaciones, este movimiento surgió en los años 70 del siglo pasado en Estados Unidos cuando grupos de corredores se juntaban en la calle para correr en compañía. Desde entonces, éstos han ido creciendo a medida que se ha popularizado la carrera a pie. Si habéis visto por Valencia o en carreras populares de nuestro territorio a un chaval de unos 36 años con un altavoz a la espalda a modo de mochila, ese es Darío Franco. Nació en Buenos Aires, Argentina y en febrero de 2024 convenció a tres amigos para salir por la ciudad del Turia. A día de hoy, cuando apenas ha pasado poco más de un año, a aquel loco de la mochila altavoz lo suelen acompañar alrededor de 200 personas.
«Yo trabajo en publicidad, soy director creativo desde hace mucho tiempo y estuve viviendo EEUU. En 2021, estaba en San Francisco corriendo solo y me crucé con un grupo de gente muy animada que iba también practicando running, serían unos 200 y me llamó la atención y me uní a ellos, posteriormente viajé a México y también volví a Buenos Aires y estuve también en clubes de este tipo. Tengo un amigo que vive en Valencia que me dijo que era una ciudad que me encantaría y en la que además la carrera a pie se vivía de una manera especial. Así que vine y empecé con él en un bar del centro que se llama Finca Bar de Barra. Viendo el ambiente y a tanta gente corriendo en lugares como el viejo cauce pensé en montar un runclub propio ya que la mayoría de personas que veía en grupos corría en clubes de atletismo al uso», explica.
Noticia relacionada
Sólo para corredores solidarios: dorsales gratis para el maratón de Valencia
El primer día salió de Finca con su mochila-altavoz acompañado sólo por tres amigos. En el nombre del grupo, Frolik, dejaba claras cuáles eran sus intenciones. «Frolicking en inglés es como correr con alegría, no por sacrificio y su propósito es conectar gente a través del running», apunta. Y lo consiguió: «Usamos el mundo digital para llevar a la gente al mundo físico, ahora en la comunidad somos mil personas y en las salidas nos juntamos alrededor de 200». El perfil de las personas que se han unido a Frolik son mujeres y hombres de entre 27 y 28 años, aunque hay de todo tipo, sobre todo, debutantes, también estudiantes de fuera de la ciudad.
Su día, (aunque posteriormente se matizará) son los martes. Para unirse a ellos, los interesados entran a su perfil de instagram o de redes sociales y entran a la comunidad. Una semana antes de la quedada se les informa del lugar del que saldrán. «Desde enero hasta el martes 1 de julio llevábamos 22 quedadas, pues cada una de esas carreras han salido desde lugares diferentes fruto de las alianzas que hemos tenido con ese número de negocios y comercios diferentes: restaurantes, bares, espacios, gimnasios. Eso supone que con Frolik también puedes conocer la ciudad con sus distintos barrios: el Carmen, Ruzafa, el Cabanyal, Pla del Real… », añade.
El rápido crecimiento de la comunidad ha llevado a Franco y su equipo que ahora suma hasta 13 personas a ampliar su agenda. Los martes por la noche es la Party Run, una carrera suave con ambiente festivo, con paradas con juegos, ejercicios. La guinda llega después del entrenamiento yendo a tomar algo, cenar o picoteo, depende del acuerdo.

Próximamente, con foco en aquellos que ya no sean debutantes, los jueves se realizarán sesiones más exigentes, con más técnica. «Será algo más rápido», comenta. Los sábados por la mañana llegan los Coffee Parties: «Son carreras suaves con un final social en cafés». Y cómo no, se les puede ver en carreras como el Medio y Maratón Valencia Trinidad Alfonso Zurich u otras pruebas del amplio calendario runner de la Comunitat.

Por otro lado, a través de la comunidad de whatsapp, los propios miembros de Frolik informan de si van a salir a correr y si algún compañero o compañera se quiere sumar. De hecho, esta conexión, así como el papel que juega este runclub para muchas personas es motivo de orgullo para Darío.
«Se formaron parejas, grupos de amigos o que han viajado a otros países, otras ciudades, a otras carreras sin que yo lo organice... para mí es súper valioso. Nosotros no somos un equipo de entrenamiento, sino una comunidad... el propósito de Frolik es conectar gente a través del running. Creo que Valencia es una ciudad en crecimiento con muchas posibilidades... intenté unir mis dos pasiones, la de crear, hacer publicidad y la de correr. Y la de generar comunidad, que básicamente por eso existimos. La gente nos dijo que Frolik les ayudó a conocer Valencia... también lo hace como algo turístico. Todo esto es muy importante para nosotros, pero sobre todo me satisface escuchar a esas personas que nos dicen que gracias a Frolik salieron de casa, hicieron deporte o incluso les sacamos de una depresión», concluye.
¿Tienes una suscripción? Inicia sesión
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.