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Espeleólogo en una cueva de estalactitas Fotolia
Cuevas en la Comunitat | Un paraíso en el subsuelo

Un paraíso en el subsuelo

La espeleología se convierte en la disciplina perfecta para los amantes de las profundidades

Sergio Gallego

Domingo, 29 de agosto 2021, 01:19

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Aunque cueste de creer, parte de los paisajes naturales más bellos del mundo están en el subsuelo. Sin embargo, no suelen ser los lugares más visitados. Los especialistas en espeleología son los que se encargan de estudiar las formaciones que se pueden encontrar en el interior de las cuevas. De hecho esta disciplina, perteneciente a la rama de las ciencias, es ahora también un deporte con riesgo.

No se puede empezar a iniciarse en esta actividad con conocimientos nulos sobre el tema. Joseba Lanzuela Irigoyen, presidente de la Federación de Espeleología de la Comunitat Valenciana aclara: «no recomendamos que la gente se inicie por su cuenta». Como en todos los deportes que implican algo de riesgo, lo mejor es formarse en clubs, en este caso de espeleología. « Es un medio en el que se desarrolla prácticamente todo en la oscuridad, y no se suele estar acostumbrado a esto» explica el presidente de la federación.

La espeleología tampoco se recomienda a cualquiera, ya que de normal se debe de contar con una buena forma física y una salud mental. «Estar en lugares estrechos, cerrados y oscuros puede producir paranoias, claustrofobia y agobio. Cualquier situación que no esté controlada puede ponerte nervioso» comenta Joseba.

Para saber y poder conocer los límites que cada uno tiene a la hora de realizar esta actividad, los clubes realizan cursos de iniciación y actividades denominadas descubrimientos. En estas, se guía a los aprendices hasta cavidades con dificultades mínimas. Con esto se pretende poder descubrir lo que es la disciplina a un nivel básico y apto para todos .

Una vez preparados, formados y listos para la aventura, estas son las rutas para principiantes más sencillas de la Comunitat:

Cova del Candil (Tous)

Esta cueva llama la atención, a parte de por sus formaciones como gours secos y su colada blanca, por sus 300 metros de progresión. La cavidad quedó cerrada por diversos aluviones hasta el año 1900, cuando Don Ramón de Sendo, habitante de la zona, agrandó un agujero creando la nueva entrada a la cueva.

La ruta en sí no presenta mucha dificultad más allá de algunas zonas elevadas y algunas cubiertas por agua, sin embargo, se debe tener cuidado con los resbalones y salas con estrecheces. Esta última en especial para las personas con claustrofobia.

Dependiendo de de la cavidad existe diferente dificultad Federación de Espelología de la Comunidad Valenciana
Imagen principal - Dependiendo de de la cavidad existe diferente dificultad
Imagen secundaria 1 - Dependiendo de de la cavidad existe diferente dificultad
Imagen secundaria 2 - Dependiendo de de la cavidad existe diferente dificultad

Cueva del Tortero (Tous)

Esta preciosa cueva, no es famosa por su gran progresión (mide apenas 100 metros), sino por sus bonitas formaciones que se pueden encontrar a lo largo de todo el recorrido. No se puede descansar la vista en ningún momento. Aunque en un principio su entrada era pequeña, los moradores de la zona la agrandaron y facilitaron su entrada creyendo que podrían encontrar minerales de valor en su interior. Sin embargo, debido a la dificultad de extracción del material, su gran entrada se acabó convirtiendo en refugio y corral del ganado de las inmediaciones.

La zona no presenta excesiva dificultad debido a que más allá de algunas partes en las que el espacio se reduce y que el lugar es resbaladizo, es de visita obligada con un guía. En su interior se puede disfrutar de sus estalagmitas, estalactitas, bloques y pequeñas salas formadas por muros de material calcáreo. Una experiencia sin igual.

Cueva del Cirat (Montán)

Esta preciosa cavidad es perfecta para la realización de actividades de formación. La Cueva del Cirat fue utilizada para la minería y desde su entrada se alcanza ver uno de los montes más altos de la Comunitat, el Penyagolosa. Esta tiene, más allá de un fácil acceso y un recorrido sin prácticamente complicaciones, un kilómetro de recorrido.

En estos mil metros lo que se pueden encontrar son salas y galerías amplias.Esto no es siempre así debido a que también hay zonas de galerías laberínticas y angostas en las que practicar y adquirir una mejor técnica. Para los pasos verticales con los que se pueden topar los visitantes se necesita destreza. Tras la actividad minera de la cueva se puede observar la erosión y el desgaste formado en las partes altas de la cavidad. Más allá de esto, el visitante podrá disfrutar de las maravillosas salas ricas en formaciones, suelo con gours que con frecuencia están inundados, estalagmitas y estalactitas etc.

Si algo queda claro para los que sean amantes de la aventura y las profundidades de la tierra, es la necesidad de formarse e ir con los guías adecuados para las primeras incursiones. Una vez en estos asombrosos lugares, lo único que se debe hacer es no dañar los interiores de los elementos naturales, tener cuidado y disfrutar.

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