Una invasión azulgrana a 600 kilómetros

El levantinismo afronta este domingo una jornada histórica. A más de 600 kilómetros de distancia, casi dos mil aficionados del conjunto granota acompañarán a su equipo del alma. Algunos ya partieron con antelación, con la idea de aprovechar el fin de semana en Burgos. Otros, salen de madrugada este domingo para estar a punto para el partido, regresando nada más terminar, ya que el lunes es laborable. Autobuses, trenes y vehículos particulares saldrán desde Valencia hacia tierras castellano-leonesas en busca de un sueño, el ansiado ascenso. Pero antes, LAS PROVINCIAS quiso invitar a un grupo de granotas al Ciutat de València para calentar la previa y palpar las sensaciones.

Marcos Gómez es uno de esos que sí que irá a Burgos. «Salimos a las siete y cuarto de la mañana para allá. Esperemos tener un buen viaje y una buena vuelta, a ver si Dios quiere y tenemos suerte. Esperemos que sí que fallen los rivales, pero no pinches tú», asegura. Andrea, en cambio, irá en bus con el grupo de animación Levante Fans. «Salimos a las seis menos diez, y espereo que ganemos, obviamente. Recemos porque sí, yo, vamos, voy a poner velas a todo para que pinchen», dice la aficionada granota.

Javier Navarro, que también viaja a Burgos, tiene nervios por todo el cuerpo. «El partido lo veo difícil como todos los partidos en esta Liga, pero posible. Regresamos al día siguiente a las seis de la mañana en bus». Otros son más optimistas, como Carlos Díaz: «Claro que vamos a Burgos, mañana a las siete. Hombre, por supuesto. Si yo ya lo estoy celebrando, ya está hecho. Obvio que ascendemos», cuenta junto a su amigo Ramón Pérez:«Sí que voy a Burgos. Allí estaremos, y pues nada, yo ya, como mi amigo, celebrando el ascenso, que este año sí que nos toca después de lo del Alavés».

No todos pueden viajar a Burgos, y los que se quedan en Valencia también animarán desde la distancia, como Kike Pons.«Yo voy a verlo en el bar La Picaeta. No tengo la suerte de poder ir a Burgos, porque el lunes trabajo, pero vamos a estar animando desde aquí, desde Valencia, y ojalá salga todo bien. Como dijo el míster, todo va a salir bien», afirma el seguidor granota.

Los niños también lo tienen claro. Óscar Martínez verá también el partido desde Valencia en un bar, «con los de Levante», como dice, «a reventar las mesas» celebrando los goles. «Pues lo que se pueda», afirma sobre la posibilidad de celebrar el ascenso este mismo domingo. Otros, como Sergi Cantor, por ejemplo, lo tienen claro: «Hay que hacer una fiesta, disfrutar lo máximo posible, porque todo va a salir bien, y nada, que Macho Llevant. No soy ni del Mirandés ni del Elche, así que no tengo ni idea si pincharán», destaca. Finalmente, Juan López verá el partido desde su casa: «Pero sí que voy a animar al Levante, como siempre». Y confía en bajar a la fuente para celebrar el ascenso.

Desde la Delegación de Peñas del Levante se ha organizado una planificación para los aficionados desplazados. A partir de las 14 horas y en los alrededores de El Plantío, habrá una 'fan zone' con juegos, comida y animación. A las 16:15, se pedirá a los granotas que se acerquen a recibir al autobús, que entrará en las instalaciones para terminar de prepararse.

Cuando los protagonistas salten al césped antes del pitido inicial, y como motivo de agradecimiento al Burgos por todas las facilidades que ha puesto al levantinismo en cuanto a la gestión de las entradas, la Delegación insta a sus miembros que se respete el himno local, en silencio y con la bufanda granota en alto.

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