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Entrevista a Mayte Ramos, CEO de Grupo Sorolla Educación


En 1980, un grupo de docentes decidió emprender un proyecto cooperativo en el barrio de Malilla, Valencia, con una convicción clara: la educación debía ser el motor de cambio social. Cuarenta y cinco años después, Grupo Sorolla Educación (GSE) es una de las cooperativas educativas más sólidas de la Comunidad Valenciana.
Hoy, la cooperativa escolariza casi 4.000 estudiantes en sus 5 centros educativos, tres de ellos internacionales, y forma cada año a más de 3.000 profesionales a través de su consultoría Global Learning, especializada en competencias técnicas y habilidades directivas. Su equipo está formado por más de 350 personas, de las cuales 300 son socias trabajadoras, reflejo de un modelo de gestión cooperativo y participativo que combina visión empresarial, innovación pedagógica y compromiso social. El grupo celebra su aniversario con una mirada estratégica al futuro.
Conversamos con Mayte Ramos, su CEO, sobre liderazgo cooperativo, transformación educativa y visión empresarial.
-45 años de historia. ¿Qué balance hace de este recorrido?
-Si tuviera que definirlo en una palabra, diría evolución. Hemos pasado de ser un grupo de docentes con un sueño común a una organización con un modelo educativo propio, una estructura empresarial sólida y un propósito claro: “formar personas para volar alto”. Durante estos años, hemos aprendido que la educación no puede limitarse a contenidos o resultados. Necesita un propósito ético y social. El nuestro es transformar la sociedad a través de la educación, formando personas comprometidas, responsables, creativas y felices.

-La cooperativa ha crecido y se ha transformado mucho en los últimos años. ¿Cómo ha vivido esa transformación?
-La palabra que mejor lo define es “transformación con propósito”. Hemos renovado nuestros espacios, nuestras metodologías y nuestra organización interna para adaptarnos a las necesidades de la sociedad actual. Nuestros centros evolucionan pensados para un aprendizaje sostenible, abierto y flexible. Mantenemos la esencia de nuestro modelo educativo dándole una nueva forma, nuevos atributos, nuevas estructuras, este es nuestro gran desafío. Transformarse implica esfuerzo, porque perturba el equilibrio y las rutinas, pero también genera futuro. Lo hacemos con una idea clara: garantizar la sostenibilidad del proyecto más allá del presente, tanto para nuestro alumnado como para quienes forman parte de la cooperativa.
-Habla de sostenibilidad más allá del presente. ¿Cómo se traduce eso en la gestión empresarial?
-En Grupo Sorolla Educación entendemos la sostenibilidad desde tres dimensiones: social, educativa y económica. Somos una empresa de economía social, y eso nos compromete con el territorio, con nuestras comunidades educativas y con la creación de empleo de calidad. Sabemos que la rentabilidad de una empresa cooperativa es directamente proporcional al valor que genera en su entorno. Por eso, cada decisión que tomamos busca generar un impacto positivo, no solo en los resultados, sino en las personas y en el entorno donde trabajamos.
-La innovación es una constante en vuestro discurso. ¿Cómo la entendéis dentro del grupo?
-Innovar no es una moda, es una actitud. En GSE apostamos por una innovación con sentido, al servicio del aprendizaje y de las personas. La integración tecnológica debe responder a las necesidades educativas reales y no al revés. Por eso, nuestras herramientas digitales, metodologías activas y programas STEAM están siempre subordinados a un principio fundamental: el acompañamiento humano. Nuestro modelo educativo, que hemos ido perfeccionando durante años, integra siete componentes que equilibran innovación, neuroeducación, desarrollo emocional y excelencia académica. Sabemos que el cerebro aprende mejor cuando se siente acompañado y valorado. Esa es la base de nuestro éxito.

-¿Cuál es la clave para gestionar el talento en un entorno educativo tan cambiante?
-Creer en las personas. Esa es nuestra verdadera ventaja competitiva. Creer en las personas y apostar por ellas es una gran responsabilidad. Nuestro compromiso es ofrecer oportunidades para desarrollar el talento de cada profesional, reconocer la diversidad y adaptarnos a las diferentes etapas y circunstancias de cada persona. La formación continua, la colaboración y la participación son el corazón de nuestro modelo de gestión. Y esa apuesta también se traslada a nuestro alumnado. Desarrollamos proyectos para fomentar la creatividad, el pensamiento crítico y el espíritu emprendedor, como Sorolla Arts, un programa que integra música, danza y teatro en el aula, o el Modelo de Parlamento Europeo, que fomenta la oratoria y la reflexión cívica desde edades tempranas.
-¿Y cómo se articula vuestro compromiso social dentro y fuera de las aulas?
-Nuestro compromiso social es real y tangible. Un ejemplo es el Centro de Desarrollo Infantil y Atención Temprana (CDIAT) Sorolla, que ofrece atención integral a niños de 0 a 6 años con necesidades de apoyo en su desarrollo. La responsabilidad social empieza por cuidar de quienes más lo necesitan. También trabajamos con las familias desde antes del nacimiento, con proyectos como la Escuela de Familias, porque entendemos la educación como una tarea compartida. No concebimos la escuela sin la participación de las familias.

-¿Qué representa este 45 aniversario para Grupo Sorolla Educación?
-Es un momento para celebrar, pero sobre todo para mirar hacia adelante. Cumplir 45 años es una muestra de solidez, pero también una llamada a la transformación. Acabamos de lanzar nuestro nuevo Plan Estratégico “Vientos de cambio, energía de futuro”, con el que queremos seguir creciendo como empresa responsable, innovadora y sostenible. “Hemos iniciado el camino de la transformación, y como todos los caminos, incluso el más largo, empieza por el primer paso. Un paso firme y decidido que nos enfoca hacia el futuro”. Este aniversario nos recuerda de dónde venimos y nos impulsa hacia lo que queremos ser: una cooperativa educativa referente en innovación, calidad y compromiso social.
-Para terminar, ¿cómo imagina el futuro de Grupo Sorolla Educación?
-Ético, emocional, sostenible y profundamente humano. La educación del futuro será híbrida, con inteligencia artificial y tecnología, sí, pero también con más necesidad que nunca de pensamiento crítico, valores, empatía y cooperación. Queremos seguir impactando positivamente en la sociedad y en el planeta. Y hacerlo desde lo que mejor sabemos hacer formar personas para volar alto.
