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Formar parte de Confecomerç es contar con respaldo, información y acompañamiento constante
En un contexto en el que el pequeño comercio afronta desafíos constantes —digitalización, competencia global, cambios en los hábitos de consumo o incertidumbre económica—, formar parte de Confecomerç es contar con respaldo, información y acompañamiento constante.
La Confederació d’Empresaris del Comerç, Servicis i Autònoms de la Comunitat Valenciana (Confecomerç) es la principal organización empresarial del sector comercial valenciano. Integra a 224 asociaciones, gremios y mercados municipales, que agrupan a más de 13.000 comercios, pymes y autónomos. Su verdadera fortaleza no está solo en las cifras, sino en su capacidad para escuchar, asesorar y resolver los problemas reales de quienes dan vida al comercio local.
Confecomerç ejerce una interlocución activa y eficaz ante las administraciones públicas, participando en los foros donde se deciden las políticas que afectan al comercio.
Su presidente, Rafael Torres, lidera también la Comisión de Comercio en la Confederación Empresarial de la Comunitat Valenciana (CEV), preside la Confederación Española de Comercio (CEC) y ocupa la vicepresidencia de Cepyme.
Esta representación garantiza que las demandas del comercio valenciano estén presentes en los espacios donde se diseñan las normativas, ayudas o medidas que inciden en su día a día. Durante momentos clave —como la pandemia o la reciente DANA—, Confecomerç ha actuado con rapidez y determinación, defendiendo con fuerza la necesidad de respuestas ágiles, ayudas eficaces y políticas adaptadas al pequeño comercio.
Estar en Confecomerç significa disponer de información fiable, clara y actualizada sobre todo lo que afecta a la actividad comercial: cambios normativos, convocatorias de ayudas y subvenciones, obligaciones fiscales o laborales, entre otras cuestiones.
La organización actúa como un centro de apoyo técnico permanente, que traduce la complejidad de la normativa en herramientas prácticas, para que asociaciones y comercios puedan centrarse en vender y crecer, sin perderse entre disposiciones y órdenes administrativas. Este acompañamiento cercano genera ahorro de tiempo, seguridad y tranquilidad, especialmente en un entorno regulatorio en constante cambio.
Uno de los pilares más valorados por los comercios asociados es la formación personalizada. Confecomerç ha desarrollado programas pioneros, que ofrecen mentoring individualizado: un formato de acompañamiento donde expertos trabajan directamente con cada comercio para dar soluciones concretas a sus necesidades y retos reales. No se trata de cursos teóricos, sino de itinerarios a medida, donde cada sesión ayuda a resolver problemas específicos: cómo mejorar la gestión del punto de venta, reorganizar el espacio, fidelizar clientes, impulsar la venta online o utilizar la digitalización para ganar eficiencia.
Este enfoque personalizado convierte la formación en una herramienta de transformación real del negocio, adaptada al tamaño, ritmo y objetivos de cada comercio.
Las campañas de comunicación impulsadas por Confecomerç son otro de los grandes puntos fuertes. Reconocidas en certámenes nacionales e internacionales, estas acciones ponen en valor al comercio local como una opción sostenible, cercana y esencial para la vida de los municipios.
A través de estas acciones se refuerza la imagen del comercio de proximidad como un modelo de consumo responsable y con impacto positivo. Cada acción se acompaña de materiales listos para usar —vídeos, banners, cartelería, bolsas o contenidos para redes sociales— que facilitan la participación de los comercios y multiplican su visibilidad.
Porque si algo define al pequeño comercio es su modelo de consumo sostenible. Bajo ese espíritu nace la campaña que Confecomerç ha impulsado este año bajo el lema “A grandes males, pequeños comercios”, con el apoyo de la Conselleria de Innovación, Industria, Comercio y Turismo. Esta iniciativa invita a la ciudadanía a reflexionar sobre el impacto en las decisiones de compra y reivindica al comercio de proximidad como la opción más adecuada frente a los “grandes males”, a los retos globales, económicos, sociales y medioambientales a los que nos enfrentamos.
El vídeo de la campaña cuenta con un mensaje claro: el comercio local no es una alternativa, es la solución. Un sector que cuida del entorno, que impulsa la economía de proximidad y que ofrece un trato humano y personalizado. Una economía sostenible que revierte sobre el territorio frente a una economía global, anónima e impersonal.
En un contexto marcado por el auge del comercio electrónico de las grandes plataformas y sus efectos —como la fuga de valor económico, el exceso de embalaje, el alto número de devoluciones y la despersonalización del acto de compra—, esta campaña pone en valor los gestos cotidianos del pequeño comercio: el consejo experto, la atención y la personalización, la calidad del producto y el compromiso con el entorno.
Cada compra en el comercio local es una declaración de principios. Es contribuir al fortalecimiento del tejido social, al dinamismo de los municipios, al crecimiento económico desde la base, a la defensa de un estilo de vida que prioriza a las personas por delante de los algoritmos y la inmediatez digital.
“A grandes males, pequeños comercios” no es solo un lema, sino una llamada a la acción colectiva. Apostar por el comercio local es apostar por un modelo más justo, consciente y resiliente. Es reconocer que, ante los desafíos del presente, las soluciones más poderosas pueden encontrarse en lo cercano, en lo cotidiano, en ese pequeño comercio que da vida a nuestras calles y sentido a nuestras decisiones. Porque cada compra es una oportunidad para construir el futuro que queremos.
Confecomerç es también una gran red de colaboración entre asociaciones, gremios y mercados municipales. Un espacio donde se comparten recursos, experiencias y buenas prácticas, generando sinergias que fortalecen a cada comercio y al conjunto del sector.
Esa unión es la que permite afrontar los retos con más fuerza, construir soluciones colectivas y avanzar hacia un comercio más competitivo, innovador y sostenible.
