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Imagen del entrenamiento del Valencia CF. LP
Fútbol | Valencia CF

«Míster queremos seguir entrenando»

Chilenas, presión para Ferran y buen rollo en la sesión preparatoria

Lourdes Martí

Valencia

Miércoles, 8 de noviembre 2017, 13:55

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Marcelino García Toral da por finalizada la sesión preparatoria. Pero sus jugadores le piden "un poco más". El técnico asturiano, sorprendido les deja trabajar unos minutos más sobre el césped. Esta situación es reflejo del estado de ánimo e implicación de unos futbolistas que disfrutan tanto en cada entrenamiento como tras cada victoria. Durante los 20 minutos anteriores, el equipo se había dividido en tres grupos para disputar un triangular en el que todos querían agradar.

"Ferran que todavía estás en la India", le gritaba Rubén Uría al subcampeón del Mundo. No era una bronca al uso. El segundo de Marcelino le daba un toque al joven de Foios porque andaba un poco despistado en uno de los partidilos en los que poco a poco subía la intensidad.

El internacional sub-17 formó equipo junto a Neto, Garay, Vezo, Jordi Sánchez y Kondogbia. Aunque el centrocampista francés llegaba a todas, el verdadero protagonista de este equipo con peto verde era el defensa portugués quien demostró que quiere ganarse un puesto en el equipo. Peleaba Vezo cada balón quien se llevó el aplauso de sus compañeros en numerosas ocasiones.

Bernal, Nacho Gil, Gonzalo Villar, Montoya, Blanco y Gayà se pusieron el peto blanco para formar parte del triangular. El joven Gonzalo dejaba destellos de su calidad y se llevaba una patada de Murillo. El central colombiano intentaba hacer una chilena y su pie en lugar del esférico daba a la cabeza del murciano: "Eh, eso es falta", se lamentaba mientras se llevaba la mano al lugar donde notó la bota de su compañero. Marcelino se lamentaba: "Yo no soy el árbitro". La situación no fue a más. No había tiempo. El equipo de Murillo, Parejo, Orellana, Nacho Vidal, Róber Ibáñez y Rivera en la portería eran los perdedores de la mañana y querían dar la vuelta a la situación. El capitán llamaba "gañán" a cada uno de sus compañeros. No aceptaba formar parte del equipo que menos partidos ganaba. Anotó el de Coslada y lo celebró a lo grande entre gritos de animadversión de sus compañeros.

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