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REDACCIÓN
VALENCIA.
Sábado, 13 de octubre 2018, 00:40
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La Guardia Civil continúa las investigaciones para identificar a la madre del bebé hallado muerto en la plata de reciclaje de Manises. Los agentes del Grupo de Homicidios han centrando sus pesquisas en tratar de localizar a alguna mujer que hubiera acudido a un centro hospitalario de Valencia con síntomas de un parto o aborto. Los investigadores sospechan que la madre dio a luz en un domicilio de una localidad valenciana de la comarca de l'Horta.
Los guardias civiles que realizaron la inspección en la planta de tratamiento de residuos urbanos, concretamente en la partida de Coscollar, examinaron de forma minuciosa los residuos y varios papeles que había junto al cuerpo para buscar pistas que podrían ayudar a los investigadores a centrar sus pesquisas en la calle o el pueblo donde los padres se habrían deshecho del cadáver poco después de dar a luz.
La investigación comenzó en la madrugada del miércoles al jueves, cuando a eso de las 4 horas un trabajador de la planta de reciclaje de Manises encontró el cadáver de una niña recién nacida durante el proceso de selección de residuos sólidos. El macabro hallazgo tuvo lugar en la cinta transportadora donde varios operarios recogen los materiales que se reciclan. Tras comprobar que se trataba de un bebé, el responsable de la empresa paralizó la actividad en la parte de las instalaciones donde estaba el cuerpo y avisó a la Guardia Civil, tal como establece el protocolo interno de la planta.
El cuerpo de la niña presentaba varios golpes en la cabeza y en la cavidad del pecho, aunque estas lesiones podría haberlas sufrido cuando ya había fallecido debido al proceso de tratamiento de residuos. De hecho, esa es la primera hipótesis con la que trabajan tanto el forense como los investigadores de la Guardia Civil: que esas lesiones sean post-mortem.
La dificultad de la investigación radica en que el proceso de clasificación de los residuos sólidos que los camiones trasladan a la planta de Manises no permite delimitar con exactitud la zona de recogida de la basura, por lo que la información que los trabajadores facilitaron a los investigadores no fue muy útil. Un infanticidio cometido en un piso de una población de la comarca de l'Horta es la principal hipótesis que baraja la Guardia Civil. Tampoco se descarta que el cadáver hubiese sido arrojado a un contenedor de la ciudad de Valencia.
El caso recuerda poderosamente a uno sucedido en la misma planta en 2013. También a las 4 horas y también en la cinta transportadora, un trabajador halló el cadáver de un niño recién nacido. Se llegó incluso a avisar a la ambulancia por si se podía hacer algo por la vida del neonato, pero fue imposible. Como ahora, la investigación se centró en un infanticidio cometido en una vivienda de la comarca de l'Horta. Los agentes de la Guardia Civil barajaron esa opción tras la minuciosa inspección del cadáver y las primeras pesquisas que realizaron en la planta de reciclaje de Manises donde apareció el cadáver.
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