El monitor de Juniors de una parroquia de Xàtiva admite la relación con menores pero no «juegos sexuales»

El monitor de un grupo de Juniors de una parroquia de Xàtiva acusado de abusar sexualmente de varios menores en su casa, y para quien las Fiscalía pide 25 años de cárcel, ha negado los delitos que se le imputan y, aunque ha reconocido que mantuvo relación con los pequeños, no mantuvo con ellos "juegos sexuales".

Los hechos juzgados hoy en la sección tercera de la Audiencia de Valencia ocurrieron en 2011, cuando los menores tenían once y trece años, y en el registro policial de su vivienda se halló abundante material pedófilo, algunas imágenes de los propios menores de los que supuestamente había abusado.

La Fiscalía pide en su calificación inicial para el acusado 25 años de cárcel por abuso sexual, posesión y tráfico de pornografía infantil, corrupción de menores y quebrantamiento de medida cautelar, ya que estando vigente una orden de alejamiento se acercó a uno de los niños y al gimnasio en el que se entrenaba.

El acusado ha reconocido que mantuvo relación con los menores fuera de la parroquia, que acudían al garaje de su vivienda familiar para que les arreglara la bicicleta o para jugar a la vídeo consola, pero ha negado que mantuviera con ellos ningún tipo de "juego sexual" o "tocamientos", como denuncian los menores.

Sí que ha reconocido que grabó y tomó fotografías a uno de los menores, de entonces trece años de edad, mientras éste se masturbaba en su habitación, tras visionar una película pornográfica que según ha asegurado el menor se descargó por internet.

El acusado ha negado sin embargo que tuviera material pedófilo en su ordenador personal ni en el de su padre, en referencia al que fue hallado en el registro policial, y ha justificado que muchos de sus amigos utilizaban su ordenador portátil cuando iban a su casa, y que las descargas las podrían haber hecho ellos.

La Fiscalía y la Acusación particular le han interrogado también sobre la relación que mantenía con los menores, y las conversación que mantuvo con ellos a través de la Red Tuenti y los numerosos mensajes de móvil que el acusado enviaba incluso de madrugada, a las 4 y 5 de la mañana.

Ha respondido que mantenía con los menores una relación de "cariño", y que buscaba en ellos consuelo por su difícil situación familiar, ya que, según ha relatado entre llantos, su padre era alcohólico y agredía a su madre, a él y sus hermanos.

En la sesión de hoy han declarado también los padres de los menores supuestamente víctimas de los abusos, entre ellos la madre de uno de los más pequeños, quien ha relatado que descubrió los hechos cuando el acusado acudió un día a su vivienda familiar.

Según ha señalado, el menor, al escuchar que quién llamaba a la puerta era el acusado "se quedó paralizado, con cara de pánico", y que el menor le confesó que le había forzado a mantener relaciones sexuales y tocamientos.

El juicio continuará el viernes con el interrogatorio a los testigos y las pruebas periciales.