Filias y fobias de vivir un mes confinado

Ya se lo preguntaba José Luis Perales mucho antes de que el coronavirus entrara sin llamar a la puerta de nuestras rutinas. ¿Cómo es él?¿A qué dedica el tiempo libre? ¿Por qué ha robado un trozo de mi vida? Un perfil sociológico en toda regla, pero cantado en tiempos de confinamiento.Y a todas esas preguntas ha dado respuesta uno de los numerosos estudios sociológicos que estos días se han lanzado a hacer todo tipo de instituciones, pero con la peculiaridad de que el de la agencia El Departamento en colaboración con la empresa de recogida de datos Netquest lo hace desde un prisma más optimista y mundano de la situación. Es el lado bueno del confinamiento. Porque aunque ahí afuera se está librando una verdadera batalla sanitaria, de puertas para adentro de nuestras hogares se combate estos días la pandemia con lo único que nos han pedido que hagamos: quedarnos en casa. Pocas veces una guerra se gana sentado en el sofá. Y en ese sillón, los valencianos se sientan acompañados y básicamente vistiendo su mejor pijama.

En la Comunitat Valenciana un 71% de los que están confinados viven en pareja, un 11% más que en el resto de España. El pijama es el uniforme oficial de la pandemia, además de las batas de los sanitarios y la ropa deportiva. Sólo un 46% de los encuestados se quita esta prenda,en origen ideada para dormir, todos los días. El 54% restante se reparte entre los que se lo quitan de lunes a viernes pero lo mantiene el fin de semana (22%); mientras que la misma cantidad lo utiliza como uniforme habitual desde el primer día de la crisis. Sólo un 10% empezó vistiéndose para estar en casa las primeras semanas y ya ha decidido seguir la pandemia en batín. Por edades, arrasan entre los que viven en pijama los jóvenes de entre 25 y 34 años (un 47%), seguidos de cerca de los millenials de hasta 24 (43%). En la dura competición por mantenerse en ropa de noche los que menos la usan para estar en casa a diario son los mayores de 65 (sólo un 16%).

Sin contar con los graves problemas económicos que se viven, en la situación de confinamiento doméstico, un 67% de los encuestados en la Comunitat asegura haber tenido más días buenos que malos, mientras que un 16% ve el vaso medio vacío en la mayoría de jornadas. Pero, en la Comunitat hay cosas que están haciendo que los valencianos lleven peor lo de estar encerrados que el resto de la población. Los hogares con mascotas (63%) son menos que en el resto de España (75%), por lo que hay menos posibilidad de escaparse a pasear con excusa. Además, aunque somos un territorio volcado con la música, estos días se reproduce menos que en el resto del país. Sólo un 42% de valencianos escucha música a diario, por un 56% en el resto de comunidades. Además, en Valencia, Alicante y Castellón se están liberando menos endorfinas 'indoor'. Sólo un 25% de los valencianos hace deporte en casa, frente a un 36% en el resto de España.

Por contra, la creatividad se ha disparado en los hogares de la Comunitat. Los juegos y manualidades con los más pequeños han crecido en más de 10 puntos y la ayuda a la hora de hacer deberes se ha incrementado en 13 puntos.

En datos globales del conjunto de comunidades, nuestros mayores, además de ser los que más están sufriendo estos días las consecuencias de la enfermedad, también son los que nos están dando una mayor lección de paciencia y civismo. Ellos son quienes mejor dicen estar llevando el confinamiento. En concreto, un 81% de los mayores de 65 sólo ha tenido días buenos o más buenos que malos. Por contra, los menores de 24 años son los más pesimistas con el aislamiento y sólo un 48% dice ver el encierro de manera optimista.

Pero, ¿qué es lo que más nos está ayudando a superar los días entre cuatro paredes?

Pues, los que comparten espacio con un perro lo tienen claro: sus mascotas (un 75%), mientras que los que no lo tienen dicen que ver series y películas hace más llevadero el confinamiento (un 75% lo valora como lo que más ayuda). Pasarlo en familia, en pareja o las redes sociales son elegidos por un 58% de los encuestados. Cocinar (45%), los aplausos de las ocho (34%)o los vecinos (un 11%) completan la serie.

El coronavirus no sólo nos ha obligado a no salir a la calle, sino también ha modificado nuestra escala de valores respecto a los comportamientos y actitudes que ahora nos parecen más loables. Con un sobresaliente (9,4) los españoles valoran por encima del resto de cosas el trabajo y esfuerzo del personal sanitario, seguido del 8,2 que ponen a la actitud de los niños, y la relación con la familia (un 8,1). Es decir, los comportamientos colectivos arrasan a los individuales y los aplausos de los balcones son sinceros. De hecho, la creatividad de cada uno, la imaginación y la energía que tenemos no supera el 6,5 de nota.

Pero, la pandemia también ha modificado totalmente nuestra manera de emplear el tiempo en nuestra casa. Así, estamos aprovechando el tiempo, pero sin desaprovechar la oportunidad de no hacer nada. Entre las cosas que ahora se hacen más que antes, arrasan por abrumadora mayoría las videollamadas (72%), las series y películas (60%) y el uso del whatsapp (57%). Por contra, la palma en las cosas que menos se hacen ahora se la llevan discutir y hacer ejercicio. Pero también se han desplomado las relaciones sexuales (un 17% menos que antes). Es decir, no se hace la guerra pero tampoco el amor.

A la hora de trabajar, lo que nos ocupa la mayor parte de la jornada de nuestro día a día, un 40% lo está haciendo desde casa y es más habitual entre personas con estudios universitarios (un 52%) y de posgrado (62%). Pero no hay que dejar de lado el dato de que un 41% de encuestados ha dejado de ir a trabajar, bien porque su actividad no es esencial, han sido víctimas de un Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) o han tenido que cerrar. En la Comunitat, un 33% de los encuestados teletrabaja desde el principio, mientras que el 17% sigue yendo a su puesto, por un 43% que ha dejado temporalmente de tener empleo.

Pero, ¿qué gusto o disgusto le hemos cogido a eso de trabajar desde casa?Pues las cifras no dejan duda, ya que un 71% de los entrevistados está teniendo casi una experiencia religiosa. Y es que un 54% le da un sobresaliente al teletrabajo y lo valora con entre 8 y 10 puntos. Sólo un 13% suspende esta práctica, por lo que podría evidenciar que la práctica de esta modalidad podría haber llegado para quedarse.

¿Y qué hay del tiempo libre en casa?

Pues todos o casi todos hemos aprovechado para tapar los huecos con nuevas aficiones u otras que teníamos olvidadas, durmiendo el sueño de los justos. Al menos el 58% de los españoles ha hecho algo nuevo o raro durante el confinamiento. De esos, un 8% se ha lanzado al bricolaje y a la limpieza, un 6% le ha quitado el polvo a las cacerolas y se ha puesto a cocinar a diario, mientras que un 5% ha innovado en su cuidado personal. Pero también hay un 5% que duerme mucho más o mucho menos de lo que lo hacía antes. Entre las respuestas abiertas también había ocurrencias, como los que han gritado por la ventana «me abuuuuurrro», han hecho crochet encima de la bici estática, han plantado una tienda de campaña en el jardín, o han hablado por primera vez con un vecino que no les caía bien.

Pero, durante el confinamiento también hay cosas que nos sacan de quicio, como en nuestra vida a. C. (antes del Coronavirus). Lo más estresante de la pandemia nos ha parecido hacer una larga cola en el supermercado. A un 38% le ha parecido desesperante, mientras que a un 18% le estresa tener que atender a todas las llamadas, las personas que enseñan cómo hacen ejercicio a diario (17%) y pensar qué hacer de comer y cenar cada día (16%). Los vecinos que nos amenizan los aplausos en los balcones como si fueran dj frustrados ponen frenéticos a un 15% de los encuestados. Por contra, no llegar en forma a la operación bikini de este año sólo preocupa a un 7%, llevar raya del tinte a un 12% y que los aplausos del balcón se adelanten unos minutos enfurece a un 12%.

Sin embargo, también hay motivos para la esperanza y todos nosotros estamos ya pensando qué será lo primero que haremos cuando nos abran la puerta de la jaula, cual canarios. Preparados, listos, ya! Y un 74% de los españoles se irá corriendo a pasear (un 87% de ellos mayores de 65 años) , un 63% quedará con amigos (un 75% si tienes menos de 35 años) y un 50% se irá a comer a un bar o restaurante. Para un 48% su placer inconfesable será comprar con tranquilidad en un supermercado y sólo un 5% irá raudo y veloz a tener una cita con un ligue. Tampoco echamos mucho de menos el transporte público (8%) ni ir al gimnasio (sólo un 19% será lo primero que haga al salir).

Y, ¿qué habremos aprendido de esta situación si es que nos sirve para algo positivo?

Pues nueve de cada diez españoles y españolas creen que nos cambiará la vida para siempre con cosas positivas y negativas. Entre las buenas, destacan que valoraremos mucho más al mundo sanitario, que seremos más conscientes de las cosas buenas y repararemos en los pequeños detalles. Por contra, sufriremos una grave crisis económica, subirán la cifra de paro, se hundirán negocios y no podremos hacer turismo tal y como lo conocemos, según la encuesta. Aún así, el 84% de los entrevistados no pierde la esperanza y cree que todo acabará saliendo bien.

El estudio sociológico de El Departamento y Netquest ha contado con una muestra de 1023 entrevistas completadas de manera online, entre el 6 y 8 de abril de 2020. En la Comunitat Valenciana el estudio contó con 117 entrevistas.