La doctora Sara Marín Berbell advierte de cuándo no hay que ducharse para no tener «acidez, pesadez o incluso mareos»
La experta ha hablado en redes sociales de una de las rutinas más habituales que, según el momento en que se realice, «puede hacerte mal, sobre todo a tu estómago»
Existen prácticas que se han vuelto tan cotidianas y rutinarias que no pensamos al hacerlas si, en alguna ocasión, pueden provocar algún efecto sobre nuestro organismo. Y un ejemplo de ello es la ducha. ¿Sabían que hay unos momentos del día que son mejores que otros para asearnos?
Probablemente no lo hayan pensado y es por ello por lo que la doctora Sara Marín Berbell, ha querido compartir a través de sus redes sociales (@uncafecontudoctora) un consejo. «¿Eres de los que te duchas después de comer?», pregunta a su más de 178.000 seguidores. La experta advierte de que «nunca» hay que hacerlo, porque «ducharte después de comer te puede hacer mal y sobre todo a tu estómago».
Según ha indicado, «después de comer la sangre va a tu estómago para ayudar a digerir toda esa comida, porque entonces el aparato digestivo necesita mucha energía para funcionar». Sin embargo, «si te duchas después de comer el cuerpo manda toda la sangre a la piel para abrir los vasos y ayudarte a regular la temperatura y le quita toda la prioridad al estómago, produciendo digestiones lentas, acidez, pesadez y hasta mareos», señala.
Según explica la doctora, «es una cosa parecida a lo que pasa cuando tu madre o tu abuela te decían que te iba a dar un corte de digestión en la playa y lo que ocurre es realmente tu cuerpo intentando regular la temperatura».
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Por último, acoseja que «la próxima vez que te metas una comilona o una supercena, sobre todo en verano, espera 30 o 60 minutos para ducharte».
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