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Imagen del encuentro del Ontinyent jugado en su feudo. web ontinyent cf.es
El Ontinyent despierta del sueño copero

El Ontinyent despierta del sueño copero

Un lanzamiento de falta y un contragolpe deciden la eliminatoria e impiden que el conjunto de la Vall se mida a un grande Dos tantos al final del choque dejan fuera de la competición a los de Miguel Ángel Mullor

MANUEL GARCÍA

ONTINYENT.

Jueves, 1 de enero 1970

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El Ontinyent quedó eliminado de la Copa del Rey al caer (2-0) contra el Melilla en un encuentro disputado anoche en tierras norteafricanas. Los de la Vall d'Albaida se quedan así sin la opción de jugar contra uno de los equipos que actualmente disputan competición europea y no estarán en el bombo mañana viernes como sí estará el Melilla, cuya afición y jugadores tendrán la ilusión de medirse a un grande.

En la primera mitad, la igualdad fue la nota característica del choque. Soler se mostraba como el jugador más activo del Ontinyent y era quien tenía las ocasiones más claras aunque sin que pudiera materializarlas. Los locales también tuvieron sus opciones pero el respeto fue el que dominó los primeros minutos sin que se moviera el marcador.

Tras el descanso, el Ontinyent salió dispuesto a conseguir la clasificación pero fue el portero ontinyentí Satoca quien resolvió una doble ocasión del jugador local Yacine y evitó que se pudiera abrir el marcador. El técnico Miguel Ángel Mullor dio entrada a Henrique y Jordi buscando aire fresco en sus filas. El equipo que ayer vestía con un uniforme totalmente fluorescente dominaba la situación pero no conseguía acercarse con excesivo peligro.

A falta de seis minutos para el final, una falta lateral fue rematada al fondo de la red en posición acrobática por el central Aguza, lo que provocó el delirio en la afición local. El Ontinyent se lanzó a tumba abierta en busca de conseguir el empate, ya que quedaba muy poco tiempo, y fue en ese momento cuando el equipo local sentenció en un contragolpe por medio de Ruano. Poco después, el árbitro pitaba el final del encuentro y daba por finalizada la estancia del Ontinyent en la Copa del Rey, en la que ha completado un más que digno papel.

Pero tras el resultado negativo de ayer, queda poco tiempo para el descanso y hay que buscar nuevos objetivos. El próximo domingo a las doce del mediodía vuelve la competición liguera y lo hace con una importante visita al feudo del Atlético Baleares. Los de las islas tienen los mismos puntos que el Ontinyent (12). Ambos están a dos puntos de la promoción de ascenso, por lo que un triunfo podría abrir de nuevo la puerta a estar entre los mejores.

Como contrapartida, el conjunto ontinyentí tendrá que superar el cansancio acumulado tras el intenso choque de ayer y olvidar la derrota por 0 goles a 3 que recibió en su casa contra el filial del FC Barcelona, el equipo que, con 14 puntos, ocupa la línea de promoción de ascenso. Los de la capital de La Vall d'Albaida son conscientes de que su rival tratará de imponer un ritmo alto de encuentro para que el cansancio acumulado aflore cuanto antes en sus piernas.

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