La pinza PSPV-Podemos desquicia a Compromís

Todo matrimonio, por muy bien avenido que sea, nunca es ajeno a las injerencias externas. Una de ellas, siempre suele ser la de la incorporación de nuevos miembros al núcleo familiar. Y en este caso, ese elemento distorsionador para la relación del PSPV y Compromís lleva nombre de mellizos: Unidas Podemos. Su irrupción en el Gobierno valenciano ha supuesto un nuevo paradigma en las negociaciones para dar forma al nuevo Consell y amenaza incluso la estrategia de alianzas de Pedro Sánchez en Madrid.

La séptima reunión de ayer de la comisión negociadora resultó casi insuficiente, en sus dos sesiones de mañana y tarde, para cerrar definitivamente el acuerdo que mañana convertirá en presidente al socialista Ximo Puig.

Con el reparto de consellerias fijado en seis para el PSPV, cuatro para Compromís y dos para Podemos, los únicos flecos por atar pasaban ayer por la inclusión o no de Puig en el reparto final (es decir, si dejar en doce o en 12+1 las consellerias), en el nombre de las áreas y si hay una vicepresidencia extra para Podemos, y en el reparto de las mismas y sus competencias. Ayer por la tarde, cuando el qué se dio por finiquitado, se retomó el debate sobre estos asuntos con un grado de tensión moderado entre las partes. Tanto es así que el presidente y la vicepresidente se reunieron a mediodía en el Palau de la Generalitat para rebajar la tensión existente ante la falta de acuerdo.

La pinza que el día anterior habían conformado PSPV y Unidas Podemos para dejar el número de consellerias en doce y dejar a Compromís como único partido que pierde representación en el nuevo Consell, acabó por desquiciar a la formación de Oltra.

Tanto es así que ayer, a primera hora de la tarde se volvió a retomar el debate que se había dado por cerrado la tarde del domingo. El acuerdo para dejar en doce las áreas hizo rebajar a Compromís una de las consellerias que tenía esta pasada legislatura. Pero, no sólo eso. Podemos, que ocupará la cartera de Vivienda (un área de nueva creación tras su escisión de Obras Públicas) quería ayer asumir competencias en Medio Ambiente. Pero corresponden a la Conselleria de Agricultura, que conserva Compromís, y de la que no tiene intención de recortar. Los nacionalistas ya han cedido suficiente con su renuncia a una cartera y así lo hicieron ver. A cambio, proponían que cediera el PSPV movilidad. Tampoco parece que verá la luz la segunda vicepresidencia.Una vicepresidencia que el líder nacional de la formación morada, Pablo Iglesias, ya había comenzado a reivindicar más allá de la Comunitat para marcarle el camino a Pedro Sánchez del papel que Podemos quiere jugar en España. En la Comunitat gestionarán Vivienda y una nueva área heredera de Transparencia con competencias en memoria histórica.