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F. M.
Martes, 3 de abril 2018, 00:16
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valencia. Divalterra, la empresa de la Diputación de Valencia heredera de la vieja Imelsa, no gana para sustos. La última polémica, generada por los contratos de alta dirección de sus directivos, se saldó con una reestructuración de la firma pública, anunciada a través de un comunicado por los dos gerentes de la empresa, Xavi Simón - a propuesta del PSPV- y Agus Brines -por Compromís-: la supresión de cuatro de las seis direcciones de área existentes. El escenario que dejó la medida fue dos direcciones de área sin ningún responsable al frente -los nombrados en el consejo del 19 de febrero presentaron su renuncia-.
Entre las direcciones de área suprimidas figura la de Gestión Forestal y del Medio Rural. Se trata de un departamento clave porque, tal y como aclara la empresa en su página web, de esta área depende el departamento de brigadas forestales. Era, de hecho, el área de la que dependía más personal -la cifra de brigadistas se sitúa en el entorno de los 600- y con mayor presupuesto.
El director del área de Gestión Forestal era Manuel Carot, titular de ese departamento desde noviembre de 2015 y uno de los profesionales más reconocidos en el seno de la empresa. Tanto es así que técnicos y coordinadores del departamento de Gestión Forestal han mostrado a través de diversos medios su respaldo a la labor realizada por Carot y su apoyo a que continúe prestando su labor en la empresa. De hecho, parece probable que la firma acabe recuperando un puesto como responsable de las brigadas forestales.
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