Pleno empleo en el segundo escalón de Fabra

Existe el pleno empleo en algún sector de la población? Pues sí. A pesar de la crisis, los profesionales con ADE, Económicas, licenciados en Matemáticas, Física y Ciencias Estadísticas de áreas específicas como Riesgos, Compliance o Procesos tienen trabajo sí o sí. Pero no son los únicos. El cerca de centenar de altos cargos que formaron parte del Consell de Fabra en sus principales escalones (secretarios autonómicos, subsecretarios y directores generales) se han librado de la cola del paro. En unos casos, prácticamente el 50%, porque han vuelto a sus plazas en la administración pública (funcionarios, docentes, médicos, abogados...), mientras que un 35% se han pasado al sector privado (principalmente consultorías del sector económico y financiero, o abogacía), otro 10% continúan en política (concejales en municipios valencianos) y en algún caso se han jubilado.

Son muy pocas las personas que fueron miembros del segundo escalón del Consell que no continúan trabajando. Los que no fueron fichados o no recibieron ofertas interesantes han optado por abrir despacho de abogado o retomar el que dejaron antes de dedicarse a la política, una actividad que cuenta con un enorme porcentaje de profesionales del Derecho. "Paradójicamente, tanto que se critica la profesionalización de la política por parte de los partidos emergentes, cuando se explicaba que el del PP era un Consell muy técnico es, precisamente, porque muchos de sus miembros procedían de la propia administración, no eran políticos profesionales, sino que contaban con una especialización importante, tanto en el ámbito de lo público pero también en el de lo privado, como ocurría en el departamento de Máximo Buch, en Economía. En mi caso, eran profesionales con muchos años de experiencia en el sector, la inmensa mayoría funcionarios y a ese nivel nadie se ha quedado sin trabajo", señala Isabel Bonig, exconsellera de Infraestructuras, Territorio y Medio Ambiente, y actualmente presidenta del PP y portavoz del grupo popular en Les Corts.

El armazón del Consell de Fabra registró su primera oleada de trasvases hacia el sector privado durante el año pasado. A finales de 2013 la situación política ya se preveía peliaguda para el PP, tal y como se dio en las pasadas elecciones autonómicas celebradas el 24 de mayo. Esas negras expectativas políticas (y, por tanto, laborales) provocó que aquellos profesionales que no eran funcionarios comenzasen a escuchar ofertas. Y a aceptarlas. Dijeron adiós secretarios autonómicos como Rafael Ripoll (a la Universidad Católica), Bruno Broseta (consultor y profesor de la Universidad Europea), Rafael Carbonell (Gobierno autonómico de Madrid) o Román Ceballos (que se fue en 2012 a KPMG y desde hace unos meses dirige SAGEP, la sociedad de estiba del Puerto de Valencia); o subsecretarios como Jesús Marí (coordinador técnico en EDEM, la escuela de empresarios impulsada por la familia Roig). No había mes en que no se despachase en los plenos del Consell el adiós de algún alto cargo. Una vez confirmada la derrota electoral, se produjo el trasvase definitivo hacia el mundo de la empresa, como es el caso del equipo de Máximo Buch, conseller que dejó Les Corts y que actualmente es consejero de EY y Noatum.

Buch no es el único miembro de la Conselleria de Economía que recala en EY. También lo ha hecho en la antigua Ernst & Young el exsecretario autonómico Díaz Requena, mientras que entre los directores generales, Joaquín Ríos está en SGR; Raúl Martín en TechTrans Market; Rafael Ripoll es concejal popular en Alcoi y Mar Casanova, asesora en el Ministerio de Economía. El que era secretario autonómico de Turismo, Daniel Marco, trabaja actualmente en Feria Valencia.

Junto a Bruno Broseta, otros destacados miembros de Hacienda han pasado al sector privado, como Miguel Sánchez. Juan Viesca trabaja en Bélgica, en Finnova, una consultoría y Mariona Roger, tras su paso por el IVF también ha pasado a la consultoría privada (provenía de PwC). Por su parte, funcionarios como Julia Cuello, Enrique montes, Ana Brugger o Vicente Peiró han retornado a su plaza. Por su parte, Pedro García Ribot, médico, está vinculado al sindicato CSI-CSIF.

De los departamentos que dirigía José Císcar, vicepresidente y conseller de Agricultura, Rubén Cortés (exdirector general) trabaja en la empresa privada, así como Marta Valsangiacomo, también exdirectora, y el ya mencionado Jesús Marí. Alfredo González, que fue director con Isabel Bonig y secretario autonómico posteriormente ha vuelto a su plaza de funcionario de grupo A en Castellón, algo que también hizo José Miguel Ferrer, exdirector general.

Salientes de Infraestructuras, Carlos Eleno volvió al Puerto de Alicante y Pablo Cotino a su plaza de asesor jurídico de la Entidad de Infraestructuras de la Generalitat (EIGE). Igualmente, volvieron a ser profesores de Conservatorio Manuel Tomás, exsecretario autonómico de María José Catalá en Educación, así como el subdirector Juan Pablo Valero. Por su parte, tanto Mateo Castella como Santiago Martí han abierto despacho de abogacía, mientras que el catedrático de la Universitat de Valencia Felipe Palau ha vuelto a su plaza. La última secretaria autonómica de Cultura del gobierno de Fabra trabaja actualmente como directiva en una empresa de formación.

Los que fueron secretarios autonómicos en el gabinete de Sánchez Zaplana (Nela García, Lucía Cerón y Manuel Escolano) han retornado a sus plazas públicas, tanto en el ramo sanitario como judicial, mientras que la exdirectora general de familia, Pilar Albert, trabaja como abogada. Del equipo de Manuel Llombart, en su mayoría trabajadores de la propia Conselleria de Sanidad, han vuelto a su plaza.

En Gobernación, Antonio Gastaldi, exsecretario autonómico, ejerce de fiscal en los juzgados de violencia de género, Asunción Quinzá, otra exsecretaria, retornó a la abogacía, especializada en derecho matrimonial, y los exdirectores Manuel Roca y Javier Monteros volvieron a sus puestos de funcionarios.

Un destino al margen de lo privado, pero también del sector público, es el de Esther Pastor, secretaria autonómica de Organización en Presidencia, actualmente asesora en el despacho abierto para la asistencia del senador Alberto Fabra, como exjefe del Consell, un cargo vinculado a lo institucional y con sueldo público. Dos secretarios autonómicos, Victoriano Sánchez y José Luis Torró, se han jubilado, mientras que en el mundo de la política permanecen Rafa Ripoll, Eusebio Monzó y la exconsellera Asunción Sánchez Zaplana como concejales, mientras que quien fuera jefe de Gabinete de Alberto Fabra, Jesús Lecha, así como el subsecretario Ignacio Ferrer (Conselleria de Sanidad) realizan labores de asesoría en el partido popular. De una manera u otra, la vida laboral no se ha detenido para el que ha sido el esqueleto del organigrama político del último Consell del PP.