Urbanismo contempla una depuradora que trate 5.000 metros cúbicos diarios

El propósito de construir una nueva depuradora para Almoradí que sustituya a las dos existentes requiere de una parcela de al menos 20.000 metros cuadrados. Por ello, desde el equipo de gobierno se ha redactado un anteproyecto para enviarlo a la Conselleria de Medio Ambiente con el fin de que señale dónde se podría ubicar la futura planta de tratamiento.

La instalación comenzaría a operar con un tratamiento terciario de las aguas residuales. La idea es que arranque absorbiendo 5.000 metros cúbicos al día, pero desde el bipartito se aboga por tener reservada una capacidad de hasta 10.000 metros cúbicos diarios tratados. Con esta previsión se aboga porque la futura Estación Depuradora de Aguas Residuales (Edar) no se quede pequeña a los pocos años de su apertura, como ocurrió con la planta que se abrió, ya que se vio desbordada poco tiempo después.

El concejal de Urbanismo, Alejandro Lorenzo, advierte que «hay que dejar una parcela para una futura ampliación». En la actualidad ninguna de los donde se ubican las actuales instalaciones, la más reciente y la antigua depuradora de El Saladar, podrían albergar un nuevo equipamiento de las dimensiones previstas.

«Tenemos que buscar un punto donde puedan confluir las dos depuradoras», comentó el concejal de IU, que agregó que «hay que intentar buscar una zona que posibilite que las conducciones y las bombas de impulsión sean lo menos costosas posible». Con tal fin se ha enviado varias opciones al órgano valenciano dentro del término municipal de Almoradí. En un principio se pensó trasladarla cerca del Azarbe del Mayayo, cerca del municipio vecino de Dolores.

«Vamos a poner el estudio encima de la mesa, una vez que digan que es factible, a partir de ahí se definirá la parcela», argumento Lorenzo. Para llevar a cabo este proyecto se necesita concretar las características de la Edar y abrir un proceso público para que la administración local compre una que se ajuste a sus necesidades. No obstante, para construir la estación depuradora se requiere además de un plan parcial especial para las instalaciones.

El PP pide reutilizar el agua

Por su parte, el Partido Popular de Almoradí ha pedido al responsable local de Urbanismo que tenga en cuenta la reutilización de las aguas depuradas para los regantes de la huerta a la hora de ubicar la nueva depuradora. La oposición considera que el proyecto actual obvia el 80% del caudal que se pueda aprovechar para dotar el riego agrícola.

En este sentido, consideran que «la intención del actual equipo de gobierno de construir una nueva depuradora empieza a oler mal» y equiparan este dotación con lo sucedido con «la planta de transferencia de basura del Consorcio Comarcal de Residuos».

El grupo Popular critica que el proyecto nace sin tener en cuenta los intereses de los agricultores ni de la huerta almoradidense. Defienden que los agricultores que se van a beneficiar del tratamiento de aguas terciarias son los vecinos de Dolores y otras poblaciones aguas abajo y consideran que «solo se aprovecharían del agua tratada pagando los propios agricultores el elevado coste eléctrico que supondría elevar dichas aguas».

En la misma línea apuntan que los caudales depurados son un elemento esencial del ciclo natural del agua y una forma de garantizar este recurso «para los parques y jardines, puesto que se necesita de manera especial en esta comarca».

El PP ha solicitado por Registro que se tenga en cuenta a la hora de ubicar la nueva depuradora el criterio de reutilización para que los agricultores puedan beneficiarse de un bien «escaso y necesario».