Nuestro Barbican

Lo comentaba en el descanso del estreno de las dos pequeñas óperas 'L'heure espagnole' de Ravel y 'Gianni Schicchi' de Puccini, lo que llamaríamos en teatro entremeses, pero de un nivel muy interesante. Dos coproducciones además con el Teatro de la Maestranza de Sevilla. Siempre he creído que los teatros periféricos deberían de colaborar más entre ellos, algo que evitaría tener que salir y sobre todo los elevados costes de este tipo de producciones.

Hoy Les Arts va creando un buen corpus de producciones y una programación en la que van teniendo cabida espectáculos diversos y conciertos no siempre alrededor de la ópera. Ya sé que conseguir el equilibrio es complejo, pero había que intentarlo. De momento se está consiguiendo esa estabilidad y diversidad. Lástima que el mastodóntico edificio cueste tanto de mantener lo que significa que le da un buen bocado al presupuesto global. Pero es lo que hay y con ello hemos de echar cuentas. Además, el ruido alrededor de Les Arts ha dejado de rugir, algo que también viene bien para pacificar desvíos de otras épocas.

Fue una tarde/noche muy interesante y de reencuentro. Visto desde otra perspectiva lo que se demuestra es que con una gestión ordenada y alejada de otros intereses espurios las cosas se pueden realizar bien. En eso hemos ganado todos. Espero que el que venga no lo vuelva a cambiarlo todo, como tanto gusta por aquí. Sería tirar por tierra un trabajo a reconocer.