Ojalá me equivoque
Para que tenga margen de ejecutar su plan, necesita del apoyo de los sospechosos habituales
Pedro Sánchez no se va a ir por propia voluntad. A su carácter destructivo se suma el hecho de que nada incentiva su marcha. Él ... sabe que jamás va a ganar unas elecciones en España y que se le han cerrado las puertas de un «retiro» dorado en la Unión Europea o en la OTAN con su política exterior unilateralista, sectaria y errática. También tiene a su esposa y a su hermano al borde de ser procesados. Y quién sabe si algo del material fecal puede acabar salpicándole los zapatos, aunque sólo fuere en las puntas. Donde mejor está es como presidente del Gobierno, disfrutando de las prebendas, de las inmunidades y aforamientos, y manteniendo el control de la Fiscalía, parte esencial de la acción penal. Lo que es peor, puede seguir manteniendo la iniciativa legislativa reservada al Ejecutivo y su lugar de prevalencia institucional para negociar el asalto definitivo al Poder Judicial. Ahí está la madre del cordero. Lo de enchufar a correligionarios a través de las consolidaciones de los jueces sustitutos, de la subjetivización de las oposiciones y de los cuartos turnos está bien, pero los efectos de la maniobra torticera sólo se pueden sentir a medio plazo, y él no tiene tiempo. Es más sencillo abalanzarse sobre las instrucciones penales en curso por medio del Ministerio Público. Con los cambios legislativos planteados por Bolaños, los jueces de instrucción desaparecerán y surgirán los fiscales de instrucción. Las unidades de policía judicial de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad, como la UCO, pasarán a depender de las instrucciones de la institución dirigida por Álvaro García Ortiz. ¿Qué puede salir mal? No digo que la intervención de los reconvertidos en jueces de garantías no atenuaría el daño, pero para entonces el monclovita ya habrá conseguido ser él el que marque los tiempos judiciales. Para que el sátrapa madrileño tenga margen temporal de ejecutar su plan personal, necesita del apoyo de los sospechosos habituales: Junts, Bildu, ERC y PNV. Así que por el camino caerán más trasferencias de competencias intransferibles, más dinero y, por fin, los referéndums de autodeterminación. Sí, los habrá. A todo le dará validez Conde Pumpido. Me llamarán pesimista. Lo sé. Pero qué otra cosa puedo hacer cuando observo que la reacción de Feijóo es la de interpelar a la conciencia de esos socios parlamentarios del autócrata que crecieron con el anhelo indisimulado de destruir España; o la de Abascal, que aprovecha el mismo día en el que se descubre uno de los peores casos de corrupción de la historia de la democracia protagonizado, otra vez, por el PSOE, ¡para criticar al PP! Además, ¡¿nadie plantea una reforma de la Constitución que nos prevenga de los Sánchez del futuro?!
¿Tienes una suscripción? Inicia sesión
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.