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R. GONZÁLEZ
DÉNIA.
Martes, 18 de septiembre 2018, 00:30
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El pistoletazo oficial a la Vendimia 2018 lo dio ayer el Consejo Regulador de la Denominación de Origen Vinos Alicante desde la Bodega La Algueña con cinco mujeres como madrinas. Una de ellas fue Concha Pastor, delegada de LAS PROVINCIAS en la Marina Alta y la Safor. Junto a ella compartieron protagonismo otras cuatro periodistas: Xesca Lloria, Cristina Medina, Rosario Pagés y Carolina Sellés. En este acto, todas ellas reivindicaron el papel de la mujer en el sector.
El presidente Consejo Regulador, Antonio M. Navarro, agradeció a Pastor el haber acudido a esta apertura en estos momento tan difíciles, tras el fallecimiento de su madre la pasada semana.
La delegada de la Marina, en su emotivo discurso, rememoró la importancia histórica del cultivo de la vid en la comarca, que se remonta a los asentamientos íberos y que sigue presente en la actualidad. Según destacó, «es una tierra fecunda en vinos, con grandes caldos que en los últimos años han comenzado a despuntar como vinos de autor gracias a esa variedad que dejaron los romanos, el moscatel de Alejandría».
En ese sentido, Concha Pastor hizo hincapié en las reconocidas bodegas que hay en la comarca como Gutiérrez de la Vega de Parcent, el Celler de Joan de la Casa de Benissa, Les Freses de Jesús Pobre y M de Alejandría de Teulada. En el caso de estas dos últimas, con dos mujeres emblemáticas al frente, Mara Bañó y Cristina Rodríguez. En sus palabras tampoco faltó una mención a las cooperativas, pues «han mantenido la tradición del vino a lo largo de los años, dando carácter a sus producciones, innovando con vinos generosos que han conquistado las mesas de los restaurantes». Como ejemplo puso Bodegas Xaló y la Cooperativa Sant Vicent Ferrer.
El resto de madrinas también incidieron en el papel de la mujer y reclamaron más presencia femenina en el propio Consejo Regulador. Además, algunas rememoraron la importancia del campo en su niñez.
Las cinco grandes protagonistas cortaron racimos de monastrell en vaso y después se llevó a cabo una visita a la Bodega La Algueña y a la cava de fondillón, uno de sus caldos estrella. La bodega está formada por unos 400 socios pero quiere expandirse. La apertura de la vendimia celebrada allí ayer supone un respaldo para que se mantenga el cultivo de la vid en esa zona.
Desde la DOP Vinos Alicante destacaron que se prevé una buena cosecha. La estimación es que sea al alza en la provincia y en la Marina Alta y que se alcancen los 30 millones de kilos de uva. Según apuntaron, las últimas lluvias pueden ralentizar el proceso de recolección pero no afectará a la calidad.
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