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Los pequeños de la Escuela Infantil La Purísima, ayer, en la procesión de la patrona por las calles de la ciudad para pedir que llueva en el municipio.

Niños de Benissa sacan en procesión una imagen de la patrona para pedir que lleguen las lluvias

La Escuela Infantil La Purísima recuerda las rogativas que se hacían en el municipio en la primera década del siglo XX ante la pertinaz sequía

RAÚL MARTÍNEZ

Viernes, 16 de mayo 2014, 00:10

Los alumnos de la Escuela Infantil La Purísima de Benissa, coincidiendo con el mes de María, sacaron ayer en procesión unas diminutas andas y una pequeña imagen de la Puríssima Xiqueta, patrona de la localidad, para hacer una rogativa y pedir que lleguen las lluvias a un municipio donde no llueve desde el 21 de diciembre de 2013 y donde la sequía es cada vez más patente. De hecho, ayer hubo dos pequeños incendios.

La fecha prevista para este acto estaba fijada por parte de la dirección de esta escuela infantil para el miércoles cuando, curiosamente y ya preparados para salir en procesión, comenzaron a caer unas gotas de lluvia y los niños tuvieron que quedarse en sus aulas y posponerlo hasta el día siguiente.

Por lo que ayer por la mañana, los pequeños portadores de la Puríssima Xiqueta salieron de su escuela por la calle que lleva el nombre de la patrona de los benisseros para llegar a la casa de Juan Vives. El hogar donde hace muchos años sus dueños hospedaron a dos peregrinos que, al abandonar la casa y en muestra de su agradecimiento, decidieron regalar a sus dueños la venerada imagen. Una vez allí, los pequeños entonaron la Salve a la Virgen, al igual que hace unos días hicieron miles de benisseros como marca la tradición en sus fiestas patronales.

Ahora cabe esperar para ver si la plegaria de estos niños y también deseo de muchos vecinos de la localidad se hace realidad y llega la tan esperada lluvia.

La súplica de estos pequeños de entre 2 y 3 años, que asisten a esta escuela infantil católica franciscana, tiene sus orígenes en la primera década del siglo XX.

Según recuerda el cronista de Benissa, Joan Josep Cardona, el padre Fabregat narra en su libro 'Benissa y la patrona la Purísima Chiqueta', cómo en la década de 1910 a 1920, época de las grandes sequías en Benissa, la gente salía a la calle en procesión a hacer rogativas para pedir que lloviese. El popular volumen del padre franciscano recoge unos gozos para pedir la lluvia a la patrona de Benissa que reza lo siguiente: "os suplicamos, Señor, por la intercesión de la Inmaculada Virgen María que nos des la saludable lluvia y que benévolamente riegues la superficie árida y seca de la tierra...".

Además comenta Fabregat en su libro que uno de los milagros de la patrona fue la "provisión de generosa lluvia en una época de gran sequía".

En una de las procesiones, según contaban los más mayores del municipio, sacaron la imagen de la Puríssima Xiqueta por las calles y antes de llegar al templo, comenzó a llover muy fuerte. La mayor parte de la gente que iba procesionando optó por resguardarse del agua en algunas de las casas de las calles por donde iba la imagen de la patrona.

Sin embargo, el clero decidió seguir adelante hasta llegar a la iglesia. Todos llegaron empapados de agua menos la Puríssima Xiqueta, que era y es un relicario. Una vez se encontraba ya en el interior del templo parroquial, uno de los sacerdotes cogió un pañuelo para limpiar la imagen y comprobó que estaba prácticamente seca.

Ahora, más de cien años después de aquel hecho, y coincidiendo con la pertinaz sequía que incrementa el riesgo de incendios en este municipio y otros de la Comunitat Valenciana, los pequeños de la Escuela Infantil la Purísima decidieron rememorar a sus antepasados y rogarle a su patrona que llueva.

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