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ALBERTO MARTÍNEZ
VALENCIA.
Martes, 14 de mayo 2019, 00:32
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Tras dos meses de bloqueo, el nuevo proyecto del Levante sentará sus bases. Y todo empieza por definir el futuro de la dirección deportiva del club. Los preocupantes resultados firmados a partir de febrero provocaron que el presidente azulgrana, Quico Catalán, aparcara las conversaciones con el máximo responsable de la confección de las plantillas de las tres últimas temporadas, Tito Blanco. Ahora, después de alcanzar la permanencia matemática, la cúpula granota vuelve a respirar y se prepara para retomar los asuntos pendientes. Entre ellos, también aparece la situación contractual del entrenador, Paco López, así como determinadas operaciones que estaban condicionadas a la salvación.
El consejo de administración del Levante se reunirá próximamente para realizar un balance de la temporada y analizar los trámites relacionados con la reforma del Ciutat de València y la ciudad deportiva de Nazaret. Durante ese encuentro, volverá a estar sobre la mesa el nombre de Tito. Algo que no ocurre desde el pasado 21 de marzo. Aquel día, el director deportivo presentó a la cúpula su plan de trabajo, el nuevo organigrama que implantaría y los diferentes cambios que aplicaría.
El consejo aprobó el planteamiento de Tito en líneas generales, aunque avisó de que había que pulir determinados aspectos. Y se encomendó a Catalán la misión de trabajar codo con codo con el de Benidorm para introducir ciertos matices y designar a las personas que ocuparían cada área. Y es que el alicantino prescindiría de algunos de los integrantes de su actual grupo de trabajo.
Tito, cuyo contrato expira el 30 de junio, estaba más cerca de renovar que de marcharse. Sin embargo, los pobres resultados del equipo llevaron a Catalán a dejar en suspenso las conversaciones con el alicantino. El equipo se acercaba peligrosamente a la zona de descenso.
«Hace dos meses empezamos a abordar el análisis de la dirección deportiva, pero con toda la vorágine de resultados no se ha hecho absolutamente nada. En las próximas fechas tenemos que sentarnos con más tranquilidad y tomar decisiones con mayor frialdad», avisó Catalán justo después de la victoria cosechada en Montilivi. El equipo, con tres triunfos en las cuatro últimas jornadas, selló la permanencia en Girona. «Ha sido una temporada rara, con mucha complicación anormal. El fútbol ha sido justo con nosotros al final, pero no del todo. Y culpa tendremos nosotros. Aunque nos hayamos salvado tenemos que hacer un análisis interno y ver en qué cosas hemos fallado y qué podemos corregir. Hay cosas que mejorar», añadió el presidente azulgrana.
El paso de Toño por la cárcel, el acuerdo de Jason con el Valencia, la inesperada venta de Boateng, las polémicas arbitrales... Varios factores han influido en la inestabilidad del equipo. Los problemas defensivos y el tardío rendimiento del fichaje más caro de la historia del club, Nikola Vukcevic, también han afectado. Al margen de la incertidumbre que rodea a Tito, Paco López tiene garantizada su continuidad.
«Paco nunca, ni en los momentos más jodidos, ha estado cuestionado. La confianza es plena. Y yo estoy no convencido, sino lo siguiente, de que Paco va a ser el entrenador del Levante la temporada que viene», afirmó Catalán el domingo. El de Silla renueva automáticamente hasta 2020 por la permanencia. En cualquier caso, está previsto que el presidente se reúna pronto con los agentes del técnico para estudiar su situación contractual. Todo apunta a que el Levante le ofrecerá un compromiso más largo. Al mismo tiempo, la salvación permitirá formalizar los fichajes de Miramón y Hernani, ya que el acuerdo con Clerc se mantenía también en Segunda.
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