La modelo australiana Bree Keller, de 22 años, falleció el pasado 9 de septiembre en Sidney. El coche en el que viajaba junto a otras tres personas se salió de la carretera y comenzó a arder después de que el conductor perdiera el control. El vehículo era un Nissan GTR-R35, un modelo valorado en 176.000 euros.
El novio de la joven, Isaac Treml, compartió en Instagram la noticia junto a una emotiva despedida: «La mujer que amó mis defectos, mi dulce corazón, a mi hija y sobre todo a mí siendo yo mismo. Mi mundo se ha derrumbado al saber que nunca más la veré. Eres lo mejor que me ha pasado. Me enseñaste a ser un mejor padre, a cómo amar y a cómo ser amado. Me enseñaste qué es realmente la vida y me ayudaste siendo tan positiva. Eres mi mejor amiga, el amor de mi vida y sobre todo la mujer con la que habría querido envejecer».
El encargado de publicar la trágica noticia, el Daily Telegraph, ha tenido acceso a las declaraciones del padrastro de la modelo, quien ha añadido que «era adorable, una persona llena de vida... Era un espíritu libre y la echaremos de menos».
En el mismo accidente, también perdieron la vida los hermanos Jeff y Steve Nasr, de 29 y 31 años. Un cuarto integrante, Joseph Bengala, fue el único superviviente.