Borrar
Urgente El precio de la luz sigue a la baja este Viernes Santo: las horas que costará menos de 1 euro
Nicole con el pequeño Boomer en brazos en Río de Janeiro. :: PATRICK B. KRAEMER/efe
Una novia 'waterproof'

Una novia 'waterproof'

Nicole Michele Johnson, la prometida de Phelps, ha aguantado el oleaje de una intermitente y turbulenta relación sin tragar agua

LAS PROVINCIAS

Miércoles, 17 de agosto 2016, 00:25

Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.

Compartir

Pronto seré la señora Phelps». Esta afirmación no tendría nada de raro si Nicole Michele Johnson la hubiera pronunciado estos días en Río. Porque efectivamente le quedan apenas dos meses para contraer matrimonio con ese hombre que lleva más medallas de oro al cuello que El Cigala, aunque por otros motivos... Pero es que la frase («Pronto seré la señora Phelps»), la difundió Nicole en febrero de 2015 en las redes sociales, hace año y medio. Así que esta chica merece como mínimo un diploma olímpico a la paciencia.

Morena, risueña, de sonrisa bondadosa y maternal, Nicole ha dejado atrás un pasado como Miss California para entregarse por completo al papel de entrañable acompañante de un mito viviente del deporte. Y lo ha bordado. En las gradas de Río no se le ha visto un mal gesto. Formando un todo con su bebé de tres meses, ha animado y ha apoyado a su chico con alegría y sin fisuras, pero también sin estridencias. Ella, Michael y su pequeño Boomer constituyen la imagen de la perfecta familia americana. Atrás quedan episodios tan sórdidos como las dos detenciones del nadador por conducir borracho, su ingreso en una clínica de desintoxicación o su extraño idilio con una modelo intersexual, que tenía pene y útero a la vez... O sea, lo normal en cualquier familia americana perfecta.

Phelps y Nicole, ambos de 31 años, se conocieron en 2007 pero rompieron en 2012, tras las Olimpiadas de Londres, cuando el imbatible nadador era incapaz de digerir tanto oro... Su relación se ha ido a pique varias veces. Y si al final se ha salvado, ha sido gracias a que el suyo era un amor 'waterproof' con una flotabilidad superior a la del tiburón de Baltimore. Recién rehabilitado, Phelps se sintió náufrago sin Nicole. Pero necesitó muchos whatsapps para lograr un reencuentro... Ella ya estaba saliendo con otro. «Hemos estado de forma intermitente durante ocho años. Hemos pasado por muchas cosas. Pero la amo hasta la muerte. Hemos sido capaces de crecer como pareja a través de todo lo que hemos pasado, y ella tiene mucho que ver en los cambios positivos que he hecho en mi vida», ha confesado el medallista. «Nicole es perfecta para él -afirma el padre adoptivo de Phelps-. Es su confidente. No está con él por dinero. No quiere nada. Le quiere a él».

La transición

Además de coronarse como reina de la belleza del estado de la Costa Oeste con más guapas por metro cuadrado, Nicole Michele Johnson se graduó con honores en la University of Southern California con una licenciatura en Artes en Comunicación, pero siempre estuvo muy ligada al deporte. Tras terminar la universidad, trabajó como ayudante financiera y, más tarde, como ayudante de producción. A Boomer, el primer hijo de la pareja, lo trajo al mundo el pasado 5 de mayo. La ocurrencia de ponerle Boomer ha dado para muchos chascarrillos en Estados Unidos, donde rápidamente lo apodaron 'baby Boomer', que es como denominan allí al que ha nacido en la época del 'baby boom'.

La pareja busca ahora un lugar paradisíaco donde por fin casarse y culminar la promesa que se hicieron hace año y medio. Les espera lo más importante y también lo más difícil. Phelps, que como todos los genios es un tipo complicado (en su infancia se burlaban de él y le diagnosticaron síndrome de déficit de atención e hiperactividad), tendrá que hacer la transición de anfibio a terrestre y llenar el agujero que deja la falta de adrenalina. Y Nicole va a pasar de novia del deportista más laureado de todos los tiempos a esposa de un jubilado prematuro de 31 años... En contra de lo que se dice, existe un tiburón que sí puede dejar de nadar sin morirse. Pero es el tiburón gata (o 'nurse') y el pobrecito no muerde.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios