Fuente Ymbro corona La Vilavella

Buscando un paralelismo con la Tauromaquia, es plaza de primera categoría, donde las máximas figuras de la calle quieren marcar sus diferencias. Todo cuanto sucede allí tiene importancia y relevancia. Por eso, estos días a la afición más exigente y purista se les ha llenado la boca elogiando la gran tarde de toros que se vivió este martes 14 de agosto, con dos ejemplares de Fuente Ymbro como protagonistas. La divisa propiedad de Ricardo Gallardo y la calle San Roque de La Vilavella forman un maridaje perfecto de bravura y sintonía, no en vano, es un fijo de los últimos años donde se ha ganado un puesto fruto del buen juego ofrecido por los toros de esta divisa.

Vivaracho, nº 144 y de pelo negro, y Bullicioso, nº 29, castaño, formaron un tándem perfecto que no sólo dieron una tarde de toros para el recuerdo, sino que pusieron en entredicho las habilidades y conocimientos de los recortadores actuales, que recibieron duras críticas y ácidos calificativos por los más entendidos y veteranos rodadores. Vivaracho, soltado en primer lugar, dio un juego excelente. Prontitud en la arrancada, embestida brava y emocionante, nobleza en la jurisdicción, velocidad en su galope... esas fueron algunas de sus muchas virtudes que sirvieron para que el de Fuente Ymbro emocionara a los allí presentes. Embistió a todo y con todo. Una explosión de casta como pocas veces se ve en otros toros. Salían rodadores de todas partes, nadie quería quedarse sin las ganas de quebrar y paladear la edulcorada embestida del fuenteymbro. Incluso se abusó en demasía del engaño de las chaquetas, innecesarias en toros de tanta categoría como este. A buen seguro, será uno de los astados más bravos que se podrán ver este año no solo en este barrio, sino en toda la comunidad. Fuente Ymbro plantó su bandera de la bravura.

A continuación salió Bullicioso y todo cambió. Una bravura distinta. La exigencia de la casta. Fue salir el toro, pedir los papeles y el barullo de recortadores escampó de la tormenta. ¿Dónde estaban todos aquellos que absorbieron la casta de Vivaracho?, se preguntaban los más veteranos, adivinando las cualidades de un toro con un fondo bravo, pero que exigía conocimientos y físico para sacárselo. Se plantó el toro en la calle, arrancó con peligro y sentido, con emoción. -¡Si hubiese estado aquí El Rallat!, exclamaron algunos. Se referían a Fernando Ferrer, un veterano recortador de Puçol que faltó a la cita, pero que días antes en estas mismas calles, dio toda una demostración de cómo se debe 'lidiar' un toro en las calles. El Rallat es un rodador de la vieja guardia que defiende a ultranza la manera de rodar los toros clásica, dando toda la ventaja al animal, dejar la mano en el testuz, aguantando su embestida para 'hacerle hilo' y descubrir el potencial que lleva dentro.

Así que tras más de tres horas por las calles, el aficionado se quedó con las ganas de ver el fondo bravo de Bullicioso, que completó una gran tarde de Fuente Ymbro en La Vilavella. Pronto le llegaban las noticias al ganadero Ricardo Gallardo, que ese mismo día lidió una soberbia corrida en Málaga. «Es una alegría para nosotros, claro que sí, porque el toro que es bravo, lo es en la calle y en la plaza. El nuestro es un toro que da espectáculo y todos los años nos llaman prácticamente de las mismas peñas y comisiones para quedarse con algún toro, lo que pasa es que no siempre tenemos», afirma.

Mañana sábado la expectación vuelve a estar por las nubes. En el cartel, otro cuadri. Y el domingo, el broche lo pondrá la ganadería de Jandilla, otra de las fijas en este templo del bou al carrer.