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Banda infantil de la Sociedad Musical 'La Primitiva' de Rafelbunyol. :: lp
Las escuelas de música, a la espera de las subvenciones

Las escuelas de música, a la espera de las subvenciones

Los conservatorios de la Comunitat llevan a cabo durante estos días las pruebas de acceso a enseñanzas profesionales

OCTAVIO HERNÁNDEZ BOLÍN

Miércoles, 24 de junio 2015, 23:50

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valencia. En estos días todas las escuelas de música y escuelas de educandos de la Comunitat finalizan el curso lectivo oficial. En ellas cursan sus estudios de una manera oficial y reglada más 60.000 alumnos, niños y jóvenes en su gran mayoría. Estas escuelas dependen de cada una de las 547 sociedades musicales amateurs que existen y es donde aprenden el grado elemental la casi totalidad de los educandos valencianos.

Son días de mostrar a familiares y amigos lo aprendido durante el año y las audiciones de final de curso se suceden por todas nuestras sociedades musicales. También es un buen momento para reflexionar sobre la situación en la que se encuentra su sistema educativo y sobre el tipo de modelo que queremos para el futuro.

Pese a que se han cobrado casi todos los atrasos que habían pendientes de las subvenciones de los años 2013 y 2014 por parte del Gobierno Valenciano, el colectivo vive con preocupación que haya terminado el curso escolar y que aún no se haya publicado la convocatoria de las ayudas para las Escuelas de Música del curso 2014-2015, algo que no había sucedido nunca hasta ahora.

La desaparición de otros tipos de ingresos debido a la crisis y la pérdida de cobertura por parte de las diferentes administraciones hacen que estas ayudas sean imprescindibles para que nuestras sociedades musicales puedan seguir ofreciendo una educación de calidad. El retraso en la publicación de las ayudas comportará como poco un mayor retraso en el pago de las mismas.

La formación musical que ofrecen las escuelas de música de nuestras sociedades musicales es de calidad pero con unos elevados costes. Las clases individuales de instrumentos encarecen los gastos del profesorado pero son imprescindibles para corregir problemas técnicos y dar esa atención personal que cada intérprete necesita. Por otro lado, las clases colectivas vienen muy bien para la motivación de los jóvenes instrumentistas.

En estos días también se están llevando a cabo en todos los conservatorios de la Comunitat las pruebas de acceso a las Enseñanzas Profesionales. En la gran mayoría de nuestras bandas, aprobar esta prueba de acceso al Grado Medio es el requisito imprescindible para poder acceder a la banda grande de cada sociedad musical.

Cientos de jóvenes de a partir de 11 años compiten por conseguir alguna de las escasas plazas que ofertan los conservatorios de red de la Generalitat Valenciana. Es habitual ver como 15 ó 20 niños opositan, con una excesiva presión para su corta edad, en unas pruebas de acceso para obtener una de las dos o tres plazas que se ofertan de cada instrumento. Esto les obliga en ocasiones a repetir estos exámenes en diferentes conservatorios para intentar asegurarse una plaza donde poder empezar sus estudios el curso que viene.

La gran cantidad de aspirantes, muy superior a la oferta de plazas, hace que 10.000 alumnos realicen sus estudios de Enseñanzas Profesionales en los 63 Conservatorios Municipales y Centros de Música Autorizados dependientes de sociedades musicales con el consiguiente incremento de gasto para sus respectivas familias. Estos 63 centros sirven para descongestionar la red de conservatorios de la conselleria, insuficiente para absorber este elevado número de alumnos sobrantes. Un ejemplo lo tenemos en la provincia de Castellón, donde sólo existen dos conservatorios de Enseñanzas Profesionales: uno en la ciudad de Castellón y otro en La Vall d'Uixó.

Por otro lado la orientación de todo el sistema educativo musical hacia que los alumnos cursen los estudios de Enseñanzas Profesionales provoca un alto índice de abandonos en este grado. La Federación de Sociedades Musicales cuestiona esta excesiva orientación hacia el Grado Medio y aboga por una formación permanente y de calidad dentro de las propias escuelas de música dependientes de las sociedades musicales. Algo idóneo para todos aquellos que quieren aprender y perfeccionarse con el sólo objeto de disfrutar tocando en el seno de su agrupación musical.

Sin embargo, son muchos los profesionales que destacan los beneficios que reporta a las bandas de música que sus jóvenes estudiantes cursen al menos los primeros cursos del grado profesional, pues les permite adquirir una base de conocimientos que redunda en el nivel artístico de sus respectivas agrupaciones.

Jesús Orón, director de la escuela de música de la Sociedad Musical 'La Primitiva' de Rafelbunyol destacaba que «la causa del abandono de alumnos en las enseñanzas profesionales es debido a la enorme carga lectiva a la que se ven sometidos. Una carga que va aumentando primero en la ESO y después en Bachillerato y que va paralela al incremento de la exigencia que requiere los cursos superiores de las Enseñanzas Profesionales del conservatorio. Lo ideal sería la integración real de las enseñanzas regladas y musicales pues en la ESO apenas son 2 ó 3 horas semanales de música las que se convalidan por estudiar también en el Conservatorio».

Una de las posibles soluciones, inviable por la actual situación económica, serían los centros integrados de los cuales sólo existe uno en la Comunitat Valenciana que es el de la Unió Musical de Llíria, creado en 1997 y que fue diseñado por el hasta ahora secretario autonómico de Educación, Manuel Tomás.

Se trata de un centro pionero en su género donde dentro del horario lectivo escolar se imparten toda las materias curriculares más las enseñanzas musicales teóricas, prácticas, y de conjunto musical de grado elemental.

Soplan nuevos tiempos en todas nuestras instituciones. Es el momento de abrir una reflexión sobre hacia donde queremos que se dirija nuestro sistema educativo musical. Una excelente formación musical a lo largo de los tiempos es lo que ha convertido a Valencia en sinónimo de buenos músicos y buenas bandas de música.

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