Borrar
Jaume de Vilaragut sirvió como modelo a los pintores. :: lp
Jaume de Vilaragut, un corsario encarnado en el 'Tirant lo Blanc'

Jaume de Vilaragut, un corsario encarnado en el 'Tirant lo Blanc'

Un estudio profundiza en este personaje medieval, cuya vida muestra grandes similitudes con el protagonista literario

ÓSCAR CALVÉ

Sábado, 28 de marzo 2015, 23:49

Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.

Compartir

valencia. Miguel de Cervantes, máxima figura de la literatura española al que durante estos días se le quiere negar el descanso eterno, escribió sobre el 'Tirant lo Blanc': «Dígoos verdad, señor compadre, que por su estilo es este el mejor libro del mundo; aquí comen los caballeros, y duermen y mueren en sus camas, y hacen testamento antes de su muerte, con otras cosas de que todos los demás libros de este género carecen». Cervantes advertía que una de las grandes virtudes de la obra escrita por Martorell a partir de 1460 -el mejor libro del mundo- fue el novedoso aspecto de prescindir de los elementos fabulosos y fantásticos de los que se contagiaban las obras de aventuras contemporáneas. Incluso su protagonista, Tirant, era presentado como un gran caballero no exento de ciertas debilidades humanas. Un importante estudio de Abel Soler sugiere que el personaje novelesco se inspiró en las aventuras del corsario más famoso en la historia de la Corona de Aragón: Jaume de Vilaragut i Vilanova.

Nacido hacia 1403 probablemente en Valencia, pertenecía al linaje más célebre de la nobleza valenciana, los Vilaragut. Esta familia ostentó importantes cargos al servicio de la Casa Real pero hoy nos es más conocida por sus enfrentamientos con los Centelles, apaciguados entonces por San Vicente Ferrer.

Jaume de Vilaragut se adiestró pronto en el arte de la guerra. Entre 1420 y 1423 tomó parte de una exitosa campaña mediterránea junto al padre y los hermanos de Joanot Martorell al servicio de Alfonso el Magnánimo, quien lo recompensó nombrándole caballero con tan sólo 20 años, edad en la que el personaje novelesco es dotado de idéntico honor. Vilaragut intervino en las 'bandositats' que enfrentaban facciones nobiliarias en Valencia ante los baldíos esfuerzos por evitarlas de la reina María de Castilla. La novela parodia con humor negro un pasaje similar aunque en otro contexto. La vida de Vilaragut se prestó a cualquier guión de aventuras. Cometió un crimen por el que fue condenado al exilio ocho años en 1427 a servir en las guarniciones aragonesas de Nápoles. Allí se convirtió en un sorprendente maestro de las técnicas de navegación. En 1435 formó parte del ejército aragonés que intentaba conquistar la ciudad italiana y sufrió una dura derrota. Al regresar a Valencia se documenta la estrecha amistad con Joanot Martorell, quien eligió a Vilaragut como juez en un 'combat a ultrança', es decir, un duelo a muerte. Vilaragut inició entonces un período de largos desplazamientos que le llevan a Chipre y Egipto entre otros lugares. Vivió de la piratería hasta 1447. Una piratería con tintes románticos y legendarios. En olor de multitudes y con un fantástico botín regresó a Valencia. Era un corsario bien considerado, no en vano estaba al servicio real. Tan cierto como que el aumento de su patrimonio se obtenía de forma poco ética era que sus hazañas en tierras lejanas se interpretaban como muestras del valor valenciano frente a extranjeros e infieles. Vilaragut tuvo que contar sus peripecias a su íntimo amigo el novelista; lugares, aparejos, armas y costumbres propias de aquellos lejanos lugares en los que vivió el corsario son perfectamente descritos por Martorell. Para mayor fascinación, Vilaragut fue un hombre bien parecido, así se explica que los pintores lo emplearan como modelo cuando querían pintar a San Jorge.

Incluso el nombre de la novela refuerza la tesis del famoso pirata valenciano como fuente de inspiración. Jaume de Vilaragut heredó la señoría de Albaida (término árabe que significa la blanca), cuya patética gestión le valió el sobrenombre de 'tiran d'Albaida'.

Diversos autores ya habían contemplado la posibilidad de poner la cara de un personaje histórico a 'Tirant', barajando nombres entre los que estaba Jaume de Vilaragut. Soler aporta nuevas noticias que acercan aún más esta posibilidad. Sirva de ejemplo el misterioso testamento dictado por Vilaragut en 1450: «Nós, en Jacme de Vilaragut, cavaller, habitador de la ciutat de València e senyor de la baronia d'Albayda (.) lexam a Carmesina, criada nostra, tres milia solidos reals de València». Carmesina es en la novela de Martorell el amor imposible de 'Tirant lo Blanc'.

Jaume de Vilaragut falleció en 1463. Fue enterrado en el desaparecido convento franciscano, ubicado antiguamente en las proximidades del actual ayuntamiento de Valencia. Como indicaba Cervantes, los caballeros del 'Tirant lo Blanc' morían.

Abel Soler es el autor de 'El corsari Jaume de Vilaragut i la donzella Carmesina. El cavaller que inspirà el tirant lo blanc'. 2 Vols. València, institució Alfons el Magnànim, 2014.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios