Los resultados de las elecciones generales en la Comunitat Valenciana: La opción del Botánico logra 16 escaños y un 48% de apoyos, cifras similares a populares, Ciudadanos y Vox
El voto útil de izquierdas se concentra para el Congreso en el PSOE y castiga a Compromís mientras que Cs amenaza el liderazgo del PP
Las votaciones al Congreso en la Comunitat arrojan prácticamente un empate entre el bloque de la izquierda (PSOE, Podemos y Compromís) y el de la derecha (PP, Ciudadanos y Vox). Tanto en número de votos y porcentajes, en torno al 48%, como en número de escaños, 16 por bando.
En el sector liderado por los votantes valencianos que apuestan por Pedro Sánchez como presidente del Gobierno hay una clara jerarquía en la que los socialistas mandan, doblando en porcentaje a Podemos y dejando a Compromís en apenas un 6%. De tal manera que los socialistas se quedan con 10 de los 16 diputados de izquierdas, mientras que cinco serán podemistas y solamente Baldoví representará a los nacionalistas. Sin embargo, sus rivales registran unos resultados mucho más parejos. El liderazgo de la derecha es para los populares por muy poco respecto a Ciudadanos, ni un punto porcentual, mientras Vox logra cerca del 12% y tres diputados nacionales, el triple que la candidatura que lidera el nacionalista Joan Baldoví, que se queda en cerca de 120.000 votos menos que los recibidos por el partido de Santiago Abascal.
La fragmentación entre los valencianos simpatizantes por las siglas de derechas es mucho mayor que entre sus rivales. Los populares de la Comunitat logran siete escaños, apenas uno más que Ciudadanos, y el trío de parlamentarios que representarán a Vox. El voto útil ha triunfado entre los votantes de izquierdas en la Comunitat al mirar hacia Madrid. Los porcentajes de voto de Compromís son notablemente diferentes en lo que se refiere a los sufragios destinados para el Congreso respecto a Les Corts. El significativo descenso de los votos autonómicos y nacionales supone que el simpatizante de Compromís ha diferenciado mucho entre las elecciones generales y las valencianas. El PSOE se ha visto claramente beneficiado de esta dualidad, mientras que Podemos ha registrado unos resultados peores que cuando iba en coalición con Compromís, pero notablemente mejores que la coalición nacionalista valenciana. Podría entenderse que el simpatizante de las siglas que lidera Mónica Oltra, a la hora de votar en clave nacional, se ha dividido entre PSOE y la opción podemista, una situación que no tiene nada que ver con lo que ocurre en el bloque de la derecha.
El liderazgo que el PP ha ejercido a lo largo de la historia de la democracia se ve amenazado ahora en lo que respecta al votante valenciano cuando mira hacia el Gobierno central. Los populares siguen siendo el partido más votado por los ciudadanos de la Comunitat que apuestan por la derecha, pero la diferencia respecto a Ciudadanos es mínima, ínfima. En 2016, el PP prácticamente triplicó a Cs en las votaciones valencianas al Congreso, cuando 13 diputados populares de la Comunitat ocuparon escaños en Madrid, por cinco de Ciudadanos. Esta vez, serán siete del PP y seis de Cs. El partido naranja le ha restado en tres años veinte puntos porcentuales a los azules. La diferencia entre una opción y otra es de menos de un punto y unos 20.000 votos.
En tres años, el PP ha perdido cerca de 20 puntos porcentuales de diferencia respecto a Cs
El PSOE recibe 190.000 votos más que tres años antes y casi dobla los apoyos de Podemos
Cambio de papeles PP/PSOE En términos absolutos, al margen de la comparación por bloques, se intuye un intercambio de papeles entre PP y PSOE en lo que se refiere a las preferencias de los valencianos de cara a sus representantes en el Congreso de los Diputados. Los socialistas fueron la tercera fuerza en 2016, por detrás de los populares y de la coalición electoral entre Podemos, Compromís y EU. El PSOE recibió hace tres años 539.000 apoyos, un 20% de los sufragios, lo que se consideró un resultado preocupante por la amenaza de las confluencias, que lograron un 25,4% de los votos. Por su parte, el PP sufrió entonces un espejismo. En las generales de diciembre de 2015 recibió el 31% de todos los votos, lo que seis meses después se incrementó hasta el 35%, mientras que ahora ha bajado a algo menos del 19%, algo similar a los socialistas tres años antes, y también percibiendo la sombra de un rival, la de Ciudadanos, muy cerca. Las listas socialistas de la Comunitat a las elecciones generales celebradas ayer recibieron casi el 28% de los sufragios, cerca de 190.000 votos más que tres años antes (de seis diputados, a diez) y diez puntos porcentuales por encima que el segundo, el PP, una diferencia similar a la registrada en las elecciones de 2016 entre los populares y los podemistas.
Por lo que se refiere a las confluencias de la izquierda que en 2016 lograron nueve diputados, casi 660.000 apoyos. En esta ocasión, Podemos y Compromís se quedan en seis (cinco podemistas y uno nacionalista), cerca del 21%, y unos 100.000 votos menos.
La derecha valenciana registró en 2016, entre PP y Ciudadanos, cerca de 1,2 millones de votos. En esta ocasión, la suma de populares y los naranjas, roza el millón de apoyos pero sin lograrlos. La diferencia está en la opción de Vox. La candidatura del partido de Abascal ha recibido el apoyo de más de 300.000 papeletas, un resultado notable, sólo dos puntos porcentuales menos que Podemos. La figura de Pablo Iglesias no seduce a los valencianos mucho más que la de Abascal, mientras entre los nuevos partidos es Albert Rivera el que ha conseguido convencer más a los valencianos.