Un hombre agrede con un palo al abogado Martínez Camacho

«Venía a matarme», señaló ayer el abogado ilicitano Antonio Martínez Camacho mientras se recuperaba en su casa de la brutal agresión sufrida a primera hora de la mañana, cuando se disponía a entrar en su despacho profesional. «Pensaba que no salía vivo», aseguró a este periódico tras pasar por el Hospital General, donde fue atendido de tres brechas en la cabeza y contusiones en varias partes del cuerpo.

Una agresión que se produjo a las 8.10, en el rellano que conduce a su despacho, ubicado en la calle Luis Llorente esquina a José María Buch. Según contó el propio abogado Antonio Martínez Camacho, un hombre, a quien no pudo ver la cara, le abordó por la espalda, sin previo aviso, cuando estaba subiendo los escalones y «con todas sus fuerzas comenzó a golpearme con el mango de una azada».

El letrado, que también preside la Real Orden de la Dama de Elche, se protegió la cabeza con los brazos, donde recibió numerosos golpes, además de la espalda y otras partes del cuerpo. Uno de ellos le impactó en uno de los ojos.

Los gritos de auxilio alertaron a su hermano, que en ese momento se encontraba en el despacho, y a un vecino del mismo rellano, quienes acudieron los primeros a socorrerle, sumándose más tarde el resto de personal que trabaja con él. En ese momento, el agresor huyó.

Cuando llegaron, el suelo estaba lleno de sangre por los cortes que había sufrido en la cabeza y que requirieron varios puntos de sutura, según explicó el abogado. Quienes le socorrieron en un primer momento llegaron a temer por su vida. Todos coincidieron en que el agresor «no buscaba solo darle un susto», tras presenciar la dantesca escena.

Hasta el lugar de los hechos se desplazó una ambulancia, que le trasladó al Hospital General, donde permaneció ingresado hasta pasado el mediodía, según fuentes sanitarias. Según relató el propio agredido, tras recibir el alta, «fui al despacho con la cabeza vendada y todo dolorido porque tenía que dictarle a mi secretaria un recurso para un juzgado de Novelda».

También tuvo tiempo de reunirse con responsables de la empresa concesionaria del Mercado Central, Aparcisa, de la que es representante legal, para preparar la reunión que por la tarde tuvieron con el Ayuntamiento. Pero no acudió a ese encuentro, porque se marchó a casa a recuperarse. Varios coches de la Policía intervinieron nada más producirse el suceso para tomarle declaración y hablar con los testigos del suceso.

Aunque Martínez Camacho dijo no haber podido identificar al autor de los hechos, al abordarle por la espalda, varios viandantes aseguraron que vieron cómo el supuesto agresor abandonaba a toda prisa el edificio donde se encuentra el despacho del abogado. Según los testigos, los agentes requisaron el palo utilizado para golpearle, que se quedó tirado en el suelo, lo que podrá arrojar luz a la investigación gracias a las huellas impregnadas en él. La Policía está trabajando ya sobre varias hipótesis del caso.

Camacho dijo desconocer quién podría ser el agresor. «Los abogados trabajamos en muchos casos, que unos se resuelven a favor y otros en contra, y hay gente que no lo acepta», dijo, aventurando una hipótesis. «Yo no tengo enemigos, ni me he peleado nunca con nadie», aseguró desde su domicilio.