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TRIBUNA

Adiós a Pepe Agulló

el artista siempre hablaba de su tierra en sus notas biográficas: «Para empezar, diré que soy natural de Elche, trasladado a la Sierra Norte de Madrid desde hace años»

JUAN LLORENS

Domingo, 9 de agosto 2015, 00:34

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José Agulló Román falleció el 27 de julio pasado. Y está enterrado en Pedrezuela, el pueblo de su compañera Mercedes, cerca de Cabanillas, donde vivía y trabajaba. Pero el artista siempre hablaba de su tierra en sus notas biográficas: «Para empezar, diré que soy natural de Elche, trasladado a la Sierra Norte de Madrid desde hace años. Nací en la ciudad de las palmeras el 8 de julio de 1948, a la hora bruja, sonando las campanadas de medianoche en el reloj de Calendura».

Conocí a Pepe y Mercedes a mediados de los setenta, siendo vecinos en la calle José Más Esteve. Después coincidimos en la amistad con el pintor Jorge Andrada, que acababa de llegar desde la Argentina, fijando su residencia en Crevillente. Y fueron muchas las ocasiones en que organizábamos tertulietas para estar juntos y disfrutar de las vicisitudes de nuestro trabajo. Hasta que en 1984 Pepe y Mercedes se marchan definitivamente a Madrid para establecerse en la Sierra Norte. No obstante, siempre hubieron oportunidades, como colegas o como amigos, para seguir manteniendo los encuentros. Mi último trato con Pepe y Mercedes fue en 2010, en el mesón El Palmeral y la Dama. Y el año, pasado, en la pintada del Víbora II, su hermano me ponía al corriente del último estado de su enfermedad.

A poco que preguntemos, Pepe Agulló deja en todos cuantos lo conocimos el recuerdo de una magnífica persona y un auténtico soldado de la pintura. Para quien quiera emocionarse de verdad con esto de ser artista, le sugiero que se meta en Internet y pregunte en la barra Google por «José Agulló, pintor, Elche» y lea la evolución de su trayectoria escrita por él mismo (en 18 de diciembre de 2013). Una historia de vida y de la pintura que habla de la honradez de sus acometidas pictóricas, de la belleza de su pensamiento y de la poesía de su plástica: «Mi 'Viaje' por el Arte y la pintura, desde el macro al microcosmos». Obra reivindicativa de nuestros orígenes, así como de la plena conciencia de nuestra condición y significación en el Universo.

Y Mercedes me habla de los últimos meses de nuestro amigo y de las dificultades de su producción final, ya con visión doble. Prolongación de lo que él contaba en diciembre de 2013: «Años de transición fueron 2011 y 2012. Experimenté con varias cosas buscando la tan anhelada evolución. Una crisis de salud me sacó de los titubeos previos, empujándome sin remisión al inevitable cambio. Sentí y comprendí que tenía que relajarme, aflojar tensiones y rigideces, y fluir como lo hace la vida, en comunicación con ella».

Ni que decir tiene, antes o después, los amigos pintores tendremos que organizar en Elche la exposición representativa de toda la obra de nuestro compañero. Cruelmente arrebatado. Otra vez.

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