El nuevo barrio más barato para alquilar una casa en Valencia
Jesús se convierte en el único distrito de la ciudad con un precio de arrendamiento inferior a 13 euros por metro cuadrado mientras nueve zonas están en récord histórico
Kike Cervera
Valencia
Lunes, 3 de noviembre 2025, 16:23
Las placas tectónicas del suelo arrendatario de Valencia vuelven a dejar sacudidas. La más sonada, que el distrito de Jesús (y en concreto su barrio de l'Hort de Senabre) se ha convertido este octubre en el más barato para vivir de alquiler en la capital, con un precio medio de 12,9 euros por metro cuadrado, según el último informe de Idealista.
Su caída del 3,2% mensual —y un descenso acumulado del 5,1% trimestral— lo sitúan por debajo de Patraix (13,7 €/m²), que hasta ahora encabezaba el grupo de los más asequibles. La fotografía llega, además, con un contraste llamativo, pues nueve distritos de la ciudad están en máximos históricos, mientras sólo «se salvan» Extramurs, Quatre Carreres, Pla del Real, La Saïdia y los tres más baratos: Algirós, Benimaclet y el propio Jesús.
Si bien, este último no sólo es hoy el distrito más asequible, sino también el que más rápido alquila sus viviendas. Como ya adelantó LAS PROVINCIAS el mes pasado, los pisos allí «vuelan»: la combinación de cercanía al centro, precios amables y oferta limitada provoca que los anuncios duren apenas unos días. Pese a la reciente bajada, la presión sigue siendo alta y los alquileres reales en la zona rondan los 800 euros mensuales por viviendas inferiores a los 50 m², según algunas agencias.
Por su parte, el conjunto de la ciudad mantiene una tendencia de moderación en las subidas tras años de auténtico vértigo. En octubre, el alquiler medio en Valencia se situó en 15,5 euros por metro cuadrado, 10 céntimos más que en septiembre, pero todavía 20 por debajo del máximo histórico alcanzado en mayo. La variación interanual, no obstante, sigue siendo significativa: el metro cuadrado es 1,10 euros más alto (un 7,6%) que hace un año.
Benicalap se dispara
Por su parte, el contraste dentro del propio 'Cap i Casal' es cada vez más acusado. En el extremo opuesto al enfriamiento de Jesús, Benicalap protagoniza la mayor subida anual, con un incremento del 22,5% en apenas doce meses. También en l'Olivereta (+13,8), Poblats Marítims (12,9) o Patraix (11,5) el crecimiento supera los dos dígitos, reflejando la presión de la demanda en zonas medias, donde la vivienda resulta atractiva por precio y conectividad.
En total, nueve distritos valencianos han alcanzado su máximo histórico de rentas en octubre. Ciutat Vella (19,6 €/m²), l'Eixample (18,3) y Poblats Marítims (16,6) encabezan el listado como las zonas más caras para arrendar, impulsadas por su tirón turístico y por la escasa rotación del parque residencial.
Desaceleración autonómica
La tendencia a la contención se percibe también a escala autonómica, y es que en la Comunitat Valenciana el alquiler medio se situó en 12,3 €/m², con un leve descenso mensual del 0,6%. Si bien, en el cómputo interanual aún se sitúa un 9,9% más caro que hace un año. En suma, los datos muestran que el mercado pierde velocidad tras un primer semestre de fuertes incrementos, en línea con el resto del país.
En España, el precio medio del alquiler alcanzó en octubre los 14,5 €/m², un 10,9 % más que en 2024, según el informe de Idealista. El trimestre, sin embargo, cerró con un ligero retroceso del 0,7 %, síntoma de una ralentización generalizada. Entre los mercados punteros nacionales, Valencia (+7,6%) se sitúa por detrás Madrid (11,5) y Sevilla (7,6) como las grandes urbes que más suben en el último año, mientras Barcelona (5,1) o Málaga (3,8) han reducido su ritmo.
Jesús, un respiro relativo
Pese a la flamante etiqueta de «barrio más barato», Jesús no deja de ser un refugio relativo en una ciudad donde el acceso al alquiler continúa siendo un reto para buena parte de la población. Con un precio medio de 12,9 euros por metro cuadrado, un piso de 70 m² ronda los 900€ mensuales, cifra que sigue suponiendo un esfuerzo elevado para los salarios medios de la capital.
El hecho de que en este distrito los precios hayan retrocedido muestra que el mercado empieza a corregirse por zonas, pero también que el nivel de partida sigue siendo alto. Mientras tanto, barrios tradicionalmente modestos como Benicalap o l'Olivereta marcan récords históricos y reflejan que la presión de la demanda se está desplazando fuera del anillo central.