Los británicos compran un 11,5% más de viviendas en la Comunitat pese al 'Brexit'

En concreto, entre abril y junio de este ejercicio, el mercado autonómico ha registrado 2.729 adquisiciones frente a las 2.413 alcanzadas en el segundo trimestre del pasado año, según los datos facilitados por el Colegio de Notarios de Valencia. «No tiene por qué haber ninguna incertidumbre. El perfil de los compradores es el de gente que quiere vivir aquí, son todo primeras residencias», argumenta Martínez, quien añade que «pese al 'Brexit', les sale muy rentable vivir aquí».

Por provincias, Alicante concentra la mayoría de las operaciones, como es habitual. En concreto, los británicos compraron un total de 2.422 viviendas en la provincia, a la que le sigue Valencia, con 258, y Castellón, con 49 vendidas. Las tres provincias han registrado un incremento de las adquisiciones respecto al segundo trimestre de 2017, sin embargo, el volumen de este año fue menor al del mismo periodo en 2016, cuando se celebró el referéndum sobre la salida de Reino Unido de la Unión Europea. En concreto, la consulta se celebró el 23 de junio, por lo que la mayoría de las 2.751 compras registradas entre abril y junio se realizaron antes del evento.

No obstante, el experto notarial sostiene que este acontecimiento «no ha provocado ninguna fuga» y que dicha contracción desde 2016 responde a «la estabilización» del mercado. «En 2014 el mercado británico protagonizó un tirón tremendo, hasta alcanzar un volumen de 4.000 operaciones al año. En 2016 y 2017 han bajado, pero siguen habiendo 4.500 ingleses que vienen a comprar a pesar de la amenaza del 'Brexit'. Se está estabilizando. Todas las nacionalidades han crecido o se han mantenido», sostiene Martínez.

Entre los principales motivos del dinamismo británico en la Comunitat destaca, según Martínez, la calidad de vida de la zona. «Los británicos cuentan con buenas comunicaciones y conexiones, además de que hasta ahora han tenido una situación estupenda en cuanto a sanidad y demás servicios. La gente viene porque quiere instalarse», explica el vicedecano, que añade que la inversión en vivienda «es mucho mayor que la de la naranja y el calzado».

En ese sentido, Martínez también señala el factor precio como uno de los imanes de la compra tanto británica como extranjera en general. «Nosotros estamos a precio de saldo para los extranjeros. Hay países como los nórdicos que se están incorporando, por el clima y las comunicaciones», cuenta el delegado notarial de Alicante.

Por lo que respecta al tipo de inmuebles adquiridos por los británicos, la mayoría son pisos de segunda mano. «Además, gran parte de ellos opta por invertir en rehabilitación», matiza Martínez, que incide en la liquidez del mercado inmobiliario como otro motivo de peso en la actividad. «Alicante es la primera provincia en venta de vivienda a extranjeros. Eso quiere decir que tenemos una liquidez de mercado tremenda. Cuando viene un extranjero ya piensa en si podrá desinvertir y cómo», cuenta.

En cuanto a la compra total de viviendas por parte de extranjeros, la Comunitat registró en el segundo trimestre un 13,38% más que en el mismo periodo en 2017. Además, las adquisiciones por parte de residentes españoles también se ha elevado, tal y como explica Martínez, debido a la mejora de los indicadores macroeconómicos, unido a la evolución de los precios. «La gente sabe que los precios están bastante dilatados y que seguirán creciendo, a eso se unen elementos macroeconómicos», indica.

«Ahora está creciendo otra vez la cifra global de compra por parte de españoles. Cabe recordar que en 2010 la compra nacional se hundió y los extranjeros nos salvaron», explica el vicedecano, que añade que «ya se ha absorbido buena parte del inmueble de baja calidad sobre todo por la venta forzada de bancos». A esto, se suma el concepto de ahorro e inversión que confiere la vivienda ante el «riesgo y la volatilidad» de otros vehículos. «Cuando la gente tiene algo más de ahorro vuelve al inmueble como inversión refugio», sentencia el delegado del Colegio de Notarios en Alicante.