El presidente de las pymes de la Comunitat aplaza explicar su continuidad

VALENCIA. El presidente de la Confederación de Organizaciones de la Pequeña y Mediana Empresa de la Comunitat Valenciana (Cepymeval), Juan Manuel Suárez, tenía previsto explicar este jueves a la junta directiva su intención de seguir al frente de la organización, y también como tesorero de la patronal castellonense CEC, tras dimitir al frente de la Asociación Provincial de Instalaciones Eléctricas de Castellón, por cambiar de sector, y también de la federación autonómica y de la Federación del Metal de Castellón.

Sin embargo, las numerosas ausencias previstas, entre ellas la del dirigente de Valencia Salvador Navarro, le llevaron ayer a aplazar esa convocatoria hasta que encuentren «una fecha más conveniente en términos de asistencia de miembros».

Suárez trasladó a este diario que se siente «respaldado y muy tranquilo», al considerar que los cargos en la CEC y en Cepymeval son personales, no como representante de la asociación de instaladores eléctricos que ha dejado, tras 22 años, al cambiarse al sector financiero.

Ayer aprovechó la reunión de la junta directiva de Cierval en la que se eligió al nuevo Comité Ejecutivo -en el que repite como vicepresidente y las únicas caras nuevas serán las de Miguel González y Carmelo Martínez, ambos de CEC- para comentar a Navarro y a otros dirigentes empresariales las razones de su dimisión y trasladarles que «no se iba a enrocar, pero entendía que tenia todo el derecho a continuar».

«Estoy en Cepymeval con carácter personal, como empresario, no como presidente de asociación porque el cargo es personal», sentencia Suárez en este sentido.

A falta de conocer sus explicaciones oficiales ante la junta, por parte de las pymes de la provincia de Valencia únicamente apuntan que deberán ser consultados sobre esta cuestión sus órganos de gobierno, mientras que desde Cepyme-Alicante cargan contra lo que consideran «un intento de aferrarse al cargo».

Su presidente, Cristóbal Navarro, opina que «es un ejemplo de lo que pasa en este tipo de organizaciones, en las que a veces se pierde el horizonte, la coherencia, y la representatividad pasa a ser de uno mismo y de sus intereses, por lo que se considera legitimado para continuar».

Desde Cepyme-Alicante llevan meses sin asistir a las reuniones de Cepymeval para evitar «participar en una pantomima en la que la representación de las pymes brilla por su ausencia» y previsiblemente saldrán de la organización dentro de su profunda remodelación actual.