Borrar
Txus Vidorreta da instrucciones a sus jugadores durante un partido en la Fonteta. :: EFE
Txus Vidorreta: «Hace años que dejé de ilusionarme pero me gustaría seguir en el Valencia Basket»
Baloncesto | Valencia Basket

Txus Vidorreta: «Hace años que dejé de ilusionarme pero me gustaría seguir en el Valencia Basket»

El técnico del Valencia Basket tiene clara la hoja de ruta hasta final de temporada: «Si recuperamos jugadores lucharemos por defender el título de la ACB»

Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.

Domingo, 25 de febrero 2018, 00:47

Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.

Compartir

Txus Vidorreta (Bilbao, 1966) lleva a gala en los banquillos una forma de entender la vida que aprendió en el barrio de Indautxu. Periodista de formación, le gusta ir de frente. No se corta ni para calificar de «truño» el partido de su equipo en la Copa del Rey ni para discutir con sus jefes cuando cree que tiene la razón. Algo que en una silla inestable como es el del Valencia Basket, sólo hay que revisar la hemeroteca desde Miki Vukovic, adquiere un valor añadido.

-¿Está viviendo la temporada que soñó cuando fichó en junio?

-Evidentemente que no estamos viviendo la temporada que soñaba cuando llegué a Valencia aunque creo que no llegamos mal a marzo dadas las circunstancias. Tenemos muchas cosas buenas, como ser capaces de seguir compitiendo en una Euroliga tan exigente a pesar de todas las bajas que hemos tenido, ser segundos en la ACB y haber ganado la Supercopa. El debe es no haber sido capaces de competir al nivel que el equipo podía haberlo hecho en la Copa. El balance general es bueno pero reconozco que no es el que soñé cuando firmé por el Valencia Basket.

-¿Por la plaga de lesiones?

-Nadie imaginó que íbamos a tener una media de cinco bajas por partido y hasta de ocho en algunas semanas de entrenamiento. Los jugadores han hecho un magnífico esfuerzo para que algo que a cualquier equipo hubiera debilitado de forma definitiva a nosotros nos esté dando opciones de estar vivos.

-Dígame un aspecto en el que se haya equivocado usted durante estos primeros meses.

-Tal vez en noviembre, cuando el equipo estaba bien y se produjo el regreso de algunos lesionados, fui demasiado directo para que jugadores como San Emeterio o Dubljevic tuvieran un rol importante. En enero, ese regreso de los lesionados los enfoqué de otra manera y creo que salió mejor. Ese fue un punto de aprendizaje de cara al futuro, el de hacer que el proceso de regreso de los lesionados sea más calmado.

-¿Se siente querido en Valencia?

-En general sí. Creo que a la gente le gusta que soy una persona directa, honesta y que no pongo excusas. Así me lo transmiten. Cuando te sientes menos feliz en una ciudad es cuando vas por la calle y la gente te dice cosas negativas. Eso en Valencia no me ha pasado. Al contrario, en todos los actos o eventos que el club organiza me encuentro con mucha gente que me expresa su ánimo porque comprenden las dificultades que estamos pasando.

-Dejaron de presentarle en la Fonteta cuando salta a la pista cuando arreciaban los pitos. ¿Le dolió?

-Al revés, soy de los que piensa que es importante tratar de evitar problemas. Peor sería que ni siquiera me presentaran a falta de seis minutos con el resto del equipo (bromea). No me gusta que me piten, como no le gusta a nadie, y si evitamos que se produzca pues no pasa nada. Hay que respetar a todo el mundo que se expresa pero es cierto que los pitos suenan más que los aplausos. Pasa en todos los pabellones y no sólo en la Fonteta. Les di importancia en su momento y así lo reconocí. Tomé nota y creo que hemos cumplido con ese empeño.

-¿Las críticas en las redes sociales, que van en aumento, son un reflejo de la realidad o una distorsión?

-Creo que el sentir general de la afición del Valencia Basket, como la del cualquier club, no se pulsa con lo que se lee en las redes sociales. No hablaría de una distorsión de la realidad pero sí que es cierto que el que está sólo pendiente de eso puede percibir una realidad diferente de la que yo percibo en la calle. Todavía hay una gran mayoría de gente que no dispone ni de tiempo ni necesita estar tan metida ahí.

-¿Dentro del club se siente valorado por sus superiores?

-Valoro el esfuerzo del club a todos los niveles y, a su vez, me siento valorado por el club. La comunicación es fluida. No comparto el cien por cien de las decisiones que se toman pero es lo normal, como ellos seguro no comparten el cien por cien de las que yo tomo en la pista. Me dejan actuar con total libertad y eso es lo más importante.

-Con los criterios para reforzar el equipo tras las lesiones han tenido sus más y sus menos.

-Lo que acabo de expresar también se aplica a la hora de gestionar la plantilla, tampoco compartimos al cien por cien los criterios. Quería llegar a la Copa del Rey con dos fichajes, con un base y un pívot, pero cuando se me dijo que no se me explicó el por qué. El Valencia Basket no quería encontrarse con 16 jugadores a medio plazo y ya está. Yo di mi opinión y el club la suya. Pasamos página y seguimos adelante, que es lo que estamos haciendo todo el año. Perseverando es como podemos tener buenos resultados en lo que resta de temporada.

-¿Cree que se merece un segundo año al frente del Valencia Basket?

-No depende de mí.

-Obvio, ¿pero considera que va a llegar esa oportunidad?

-Hace muchos años que dejé de ilusionarme con las cosas que no dependen de mí, porque si te ilusionas luego te desilusionas. Hay que vivir el momento y lo que toca es trabajar los meses que quedan, pero siempre he dicho que soy de ciclos largos y me gustaría seguir en el Valencia Basket. Me gustaría tener una temporada normal aquí porque, evidentemente, no la estoy teniendo.

-¿La estabilidad en el banquillo es el paso que le resta por encontrar al club? Desde Miki Vukovic la lista ha sido muy larga.

-Es complicado que yo pueda contestar a esa pregunta.

-La intención de las preguntas siempre es obtener respuesta.

-Es obvio que para construir un proyecto ganador a medio y largo plazo es fundamental el contar con un entrenador que pueda contribuir a diseñar las plantillas que se necesitan para responder a los retos, pero esa no es mi función. Cuando vino el Valencia Basket a ficharme sabía que el contrato era hasta el 30 de junio de 2018 y estoy muy centrado en culminar mi trabajo tratando de acercarme al máximo a los objetivos que me planteé cuando fiché.

-El Valencia Basket ya ha decidido ofrecerle la renovación si consigue una plaza en la Euroliga. ¿Es una motivación para conseguir el objetivo real de la temporada?

-El principal objetivo que tenemos ahora es recuperar jugadores. No podremos hablar de conseguir ningún objetivo si seguimos con las limitaciones que estamos teniendo. Del partido de Olympiacos hemos salido con la baja de Pleiss, con Dubljevic infiltrándose de nuevo factores de crecimiento para paliar en la medida de lo posible los dolores de su tendinitis crónica y Abalde tocado de la espalda. Lo que necesitamos es recuperar jugadores.

-¿El club sigue descartando el fichaje de un pívot?

-Por ahora sí. La conclusión con el club fue que si conseguíamos que Latavious Williams estuviera en la primera semana de marzo descartábamos hacer un fichaje y parece que lo va a estar, pero también existe el compromiso de que si no está vamos a acudir al mercado. Estamos en esos ocho o diez días que son claves, siempre y cuando no tengamos una lesión de larga duración en Pleiss o Dubljevic.

-¿La mejor noticia sería recuperar de una tacada a Williams, Van Rossom y Vives?

-Somos optimistas porque Latavious realizará el primer entrenamiento del equipo el domingo (por hoy), Vives comenzará el lunes a incorporarse a los ejercicios de 5x0 y la evolución de Van Rossom está siendo espectacular. El primer objetivo en las próximas dos semanas es recuperar jugadores. Si lo conseguimos lucharemos a tope por defender el título de la ACB. Tendremos unos meses de retraso con nuestros rivales pero a lo mejor más frescura. Si no podemos defender el título trataremos de repetir en Euroliga a través de conseguir la plaza en la Liga Endesa. Todo lo que estamos aprendiendo este año lo queremos demostrar que lo hemos interiorizado el próximo.

-¿La lesión de Van Rossom fue la puntilla física al equipo?

-Se lesionó cuando estaba dando casi ocho asistencias por partido en los últimos diez y ahora en los dos últimos hemos dado once en total. La incidencia de esa lesión ha sido brutal.

-¿Cómo es su relación con los servicios médicos del club?

-Muy buena. Con el doctor Miguel Frasquet creo que tengo una muy buena relación personal porque creo que una persona muy cercana, con Pablo Martínez también y con Jordan Sospedra, que es el que más viaja con nosotros. Con todos tengo buena relación. No ha habido ni un sólo problema más allá de que estamos teniendo muchas lesiones.

-¿Y la relación profesional no se ha desgastado con tanta lesión?

-Muchas veces el doctor me ha dicho que se queda alucinado porque no para de comunicarme cosas y nunca me enfado. ¿Sirve de algo que me enfade? No, pues vamos a tratar de implementar todos los medios para que los jugadores se recuperen lo antes posible. Lo que tenemos que hacer es empujar todos en la misma dirección y eso lo estamos haciendo todo el año. Otra cosa es que acertemos más o menos.

-¿Se está acertando más o menos?

-Está claro que han habido situaciones que no hemos acertado.

-¿Cómo pasa en la pista?

-Por supuesto, los servicios médicos se pueden equivocar como me equivoco yo en los partidos.

-¿Unos fallos tienen más transcendencia que otros?

-Que nadie tenga duda de que cuando ocurre algo se quedan muy tocados. Miguel Frasquet y Pablo Martínez, como máximos responsables, están pasando un año muy difícil porque tienen toda la ilusión de ayudar al equipo y de ayudarme a mí, porque saben de la inestabilidad que ha existido en el banquillo del Valencia Basket. Percibo que están a muerte conmigo y me consta que en muchos momentos les ha costado conciliar el sueño.

-¿Qué sensaciones le transmite Juan Roig cuando habla con usted?

-Siempre muy buenas. Le veo un hombre muy cercano, que le encanta hablar de baloncesto y de lo que más le gusta debatir, precisamente, es del detalle de los tiros libres o los tiempos muertos. En los demás aspectos siempre que me hace una pregunta le encanta escuchar cual es mi respuesta.

-¿Le admite consejos?

-En los aspectos bonitos del juego en donde le gusta debatir y en los que son más fundamentales para un club es donde prefiere escuchar. Sentirte escuchado por un hombre tan importante es un orgullo.

-¿Por qué incide siempre en el título de la Supercopa?

-Es uno de los tres títulos nacionales que ha conseguido el Valencia Basket en su historia y el sexto en total, creo que hay que darle el valor que se merece. Estábamos en un momento donde el equipo aspiraba a seguir ganando más títulos pero hemos tenido una estocada constante con la plaga de lesiones. Nuestro base titular, Diot, jugó sólo dos partidos, ganamos los dos y levantamos un trofeo. Es un jugador con el que tengo muy buena conexión desde el primer instante porque creo que fue clave mi conversación telefónica para que renovara cuando tenía ofertas superiores de clubes de Euroliga. Construir un equipo ganador sin bases es muy complejo.

-¿Volverá Diot esta temporada?

-No lo sé. Hace dos meses hubiera dicho que sí pero ahora hay que ver su evolución durante el mes de marzo para contestar a esa pregunta.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios