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JUAN CARLOS VILLENA
VALENCIA.
Jueves, 1 de enero 1970
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Los dos primeros viajes de la Eurocup para el Valencia Basket, lo más complicados en cuanto a logística de la primera fase, han servido al conjunto taronja para devolverle a la dura realidad ajena a la Euroliga. Para volver de Ankara, la plantilla taronja tan sólo descansó dos horas en el hotel tras el partido ante el Turk Telekom. El viaje a Rusia durará cuatro días, puesto que los taronja comenzaron ayer el desplazamiento para dormir en Barcelona y volar hoy directamente desde El Prat a San Petersburgo.
El equipo valenciano se jugará mañana ante el Zenit (19 horas, Teledeporte) el liderato del Grupo C de la Eurocup y lo hará tras la derrota al límite frente al Barcelona en la ACB. El duro inicio del calendario ha dejado al club de la Fonteta con un balance de 2-3 en los cinco primeros partidos. Desde 2010 no comenzaban la Liga Endesa ganando menos de tres en esa horquilla inicial pero nunca se habían enfrentado a Unicaja, Real Madrid y Barcelona en el arranque de temporada.
El vestuario del Valencia Basket mantiene la calma tras el inicio de la competición doméstica, sabedor de que desde el primer partido ante el Unicaja, donde el equipo dio una muy mala imagen, al 85-86 frente al conjunto de Pesic ha habido una evolución. Así lo reconoció a este periódico San Emeterio antes de iniciar el viaje a Rusia: «No soy nadie para pedir nada a la afición. La gente viene a la Fonteta y quiere que el equipo gane. Nosotros tenemos que ser conscientes de lo que estamos haciendo. El primer partido fue Málaga, contra uno de los equipos que mejor ha comenzado, y luego perdimos contra el Real Madrid para llegar al partido ante el Barça donde competimos. Eso es lo que sabemos desde dentro, siendo autoexigentes y sabiendo que tenemos mucho que mejorar. Lo estamos haciendo, poco a poco, no es algo que vaya a salir en dos semanas. Fuera que piensen lo que quieran».
Con respecto a las molestias en la rodilla que le impidieron debutar hasta el 14 de octubre, el cántabro reconoció que ya está mejor: «Ha sido un pequeño contratiempo, en el año en el que más ganas tenía de hacer toda la pretemporada y empezar bien. Afortunadamente parece que la rodilla que ha estado lesionada responde». Con respecto al envite frente al Zenit, San Emeterio se mostró ambicioso: «Si ganamos en San Petersburgo daremos un golpe encima de la mesa».
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