«Pedro Martínez me parece uno de los mejores, pero me siento preparado para seguir de primero»

El futuro de Carles Duran (Barcelona, 1976) como entrenador del Valencia Basket comenzará a despejarse hoy en una reunión en la Fonteta. El técnico pisa por primera vez el mismo parquet que unos días antes vibró con una eliminatoria épica frente al Real Madrid, pero con demasiadas aristas.

El silencio de las gradas contrasta con lo vivido el jueves. ¿Qué valoración hace de la semifinal?

Por un lado tenemos que estar contentos porque dimos el máximo y así lo entendió el público en la despedida, pero a la vez tristes porque no hemos conseguido darle un triunfo a nuestra afición en playoff. A ver si el año que viene somos capaces de darle esa alegría.

¿Y qué análisis hace de la temporada de su equipo?

Puedo analizar desde que soy el primer entrenador. Hubieron picos buenos, con una gran victoria ante el Barcelona o la eliminatoria frente al Bayern que fue espectacular, pero no conseguimos durante el año demostrar el equipo que hemos sido al final. Han pasado muchas cosas y no acabamos de rodar todos juntos.

¿Ha sido un año tan duro como parece desde fuera?

Un equipo no son sólo doce jugadores y un entrenador, sino estar todos juntos. El playoff nos ayudó a ser el equipo que siempre hablamos de ser. Es una pena que no lo hayamos podido ver más tiempo, pero tengo la satisfacción de haber logrado eso. Entiendo que la gente lo quiera desde el primer día, pero hay que analizar como ha sido este año.

A mucha gente le sorprendió lo calmado que estuvo tras lo sucedido el martes en la Fonteta.

Entiendo que la gente se enfade conmigo porque dice que no critico el arbitraje, no lo hice porque tenía en mente jugar más partidos en el playoff y porque no quiero estar con los árbitros de la ACB. Creo que se pueden equivocar como yo.

¿Siente que a su equipo se le ha faltado el respeto?

Lo que sí considero es que han respetado demasiado al Real Madrid y por momentos no han respetado por igual al Valencia Basket. Esa es mi gran queja, no en si se equivocan en unos pasos o en una falta en ataque. Me quejo de que el Madrid ha tenido un privilegio que nosotros no hemos tenido, eso no es justo.

¿Cree en el sistema después de que la ACB y la FEB se hayan saltado sus propios reglamentos?

La gran pregunta que hay que hacerse es que si lo que pasó con el acta le pasa al Valencia Basket o al Joventut, ¿Hubiera podido jugar ese jugador a mitad del partido?. Creo que no. A partir de ahí, espero que la próxima temporada los árbitros traten al Real Madrid como al resto.

¿Se ha tapado el error porque lo ha cometido uno de los dos grandes de la Liga Endesa?

Estoy contento por un lado porque a partir de ahora cualquier entrenador o delegado que cometa ese error, si no ha sido de mala fe, pueden estar tranquilos ya que no van a ser penalizados ni con un 2-0, ni con la repetición del partido ni económicamente. Si es así, el baloncesto español tiene un problema.

¿El error fue de la mesa, del Real Madrid o de los dos?

El delegado del Real Madrid y Pablo Laso cometieron un grave error, porque aunque también haya culpa de la mesa a todos los entrenadores de cualquier categoría nos enseñan que hay revisar el acta antes de firmarla. A partir de esa firma, todo entrenador sabe que el acta se cierra. Espero que el club siga luchando porque al final se le dará la razón.

¿Qué hubiera pasado si ese error lo comete usted?

Si el error lo hubiera cometido Carles Duran lo que tengo claro es que no seguiría siendo el entrenador del Valencia Basket.

El club está reflexionando sobre el banquillo. ¿Con qué sensación afronta la semana?

Cuando Paco Raga y Chechu Mulero tomaron la decisión de darme el cargo de primer entrenador me pidieron dos cosas, cambiar la situación del equipo y jugar al máximo. Nos hemos quedado a las puertas de la Final ACB y hemos cumplido con lo que nos han pedido. En enero nadie se planteaba este final. A partir de ahí, nos sentaremos a hablar.

Nunca ha escondido que le gustaría seguir en el cargo.

El club debe tener serenidad y buscar lo mejor para el equipo y para su futuro. Me siento preparado y hay que ver que me ofrecen, porque puede ser que me quede como ayudante. Soy sincero, mi cuerpo ahora me pide más y me gustaría que fuera en Valencia. Sin obligaciones ni presiones, el club es muy grande y me gusta formar parte de él. Sé los errores que he cometido, entiendo que hayan críticas y gente a la que no le guste pero me siento preparado.

¿El abrazo público de Juan Roig el jueves por la noche es un aval a tener en cuenta?

Lo único que puedo decir de Juan Roig es que desde el primer momento que le conocí me ha demostrado que es un hombre con ambición, con hambre y con mucho orgullo. Ha sido muy familiar hacia mí, su reacción tras el partido se la agradezco porque yo estaba muy mal en ese momento. El Valencia Basket es un club muy grande y me siento como en casa. Mi impresión es que están contentos conmigo pero entiendo que tienen sus dudas.

¿Si le ofrecen seguir como ayudante su respuesta dependerá del perfil de técnico que venga?

Si al final la decisión del club es que siga de ayudante será muy importante el perfil de entrenador que venga para que yo siga. Pero quiero seguir de primero.

A finales de abril LAS PROVINCIAS informó que Pedro Martínez era el preferido en el caso de cambio. ¿Encajaría en ese perfil para seguir dentro del club?

Con Pedro Martínez tengo una relación exquisita, he estado en su casa y me parece uno de los mejores entrenadores nacionales. Tendríamos que valorar muchas cosas, también él tendría que opinar llegado el caso.

¿Ha llamado a Sito Alonso en las últimas semanas?

No le he llamado. Los dos somos ambiciosos y ganadores, eso nos jugó una mala pasada en la eliminatoria. Estoy convencido de que volveremos a llamarnos en algún momento porque cuando yo lo necesite o él a mí seguro que estaremos. Nos lo hemos demostrado en otros momentos de la vida. Nuestra amistad está por encima del baloncesto pero ahora no estamos contentos.

¿Su hija le ha preguntado qué ha pasado con su padrino?

Es el padrino de mi hija y siempre que lo quiere llamar lo puede hacer con total tranquilidad. Jamás le quitaré a mi hija que Sito sea su padrino porque lo adora, y a mi me encanta que tenga ese sentimiento.

¿Cómo compaginó dos semanas de viajes a Murcia para estar al lado de su padre con su trabajo?

Fueron dos semanas muy duras. Mi padre era una persona joven y en un instante le cambió la vida. Estaba en Murcia y como mi familia es de Barcelona fui yo el que hacía el viaje para acompañarle. Fueron dos semanas de mucho stress, porque nos estábamos jugando el cuarto puesto pero también se estaba apagando la luz de mi padre.

¿Se arrepiente de haberse sentado en el banquillo ante el Bilbao?

El día del partido estaba sin fuerzas, lo reconozco. Entiendo que haya gente que me tire eso en cara y que por eso perdimos. Pero que nadie dude que lo doy todo. Esos días lo di todo por mi padre y no le pude ayudar y también por el equipo y no ganamos. Me fui con la sensación de sentir que le había fallado al Valencia Basket y a mi padre.

Pero usted no es médico.

No soy médico pero tengo ese sentimiento, mi padre tenía 57 años y fue muy duro perderle tan pronto y en tan poco tiempo.

Me deja sin palabras.

Al acabar me subí al coche y me fui a Barcelona para enterrar a mi padre. A medio camino paré en el arcén de la autopista porque me dio el bajón definitivo. Me giré a mi mujer y le dije que cogiera el coche porque yo no podía más. Entiendo que a la gente eso no le importa, pero mi mente llegó a su límite.

¿Superar la serie con Bilbao fue entonces como una liberación?

Conseguir que el club ganara una eliminatoria con desventaja de campo que nunca había conseguido me dio ese plus para seguir.

¿Se ha sentido respetado?

Entiendo que al ser un novato y un desconocido tenga la crítica aún más feroz, aunque es cierto que ha habido momentos que he pensado el porqué de tantos palos. De la gente más cercana en el club me he sentido muy querido y respetado.

¿Qué autocrítica hace?

Siempre intento que todo el mundo sea feliz y tendría que haber sido en ocasiones más egoísta aunque hubiera creado una infelicidad puntual a alguien. Me ha faltado ser más agresivo. Veo a Plaza, Laso o Pascual que han tenido un plus de agresividad que a mi me ha faltado. Eso lo tengo que mejorar. Se me ha criticado mucho la defensa pero me gustaría que los aficionados se dieran cuenta de que no tuve tiempo para preparar al equipo en la forma de defender que me gusta. A mitad de temporada eso es imposible pero entiendo que ha sido nuestro gran problema. La defensa del playoff se acerca a mi defensa, hemos llevado al límite al actual campeón de Europa.

¿Su legado es Guillem Vives?

Tuve la suerte de que lo fiché del Mini del Claret cuando tenía 12 años para el Joventut. Cuando me llamó Mulero preguntándome le dije que no dudara y que lo fichara. A Guillem le faltaba que alguien le diera confianza. La gente ha visto que se emociona jugando a baloncesto.