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Un infierno con sonido a mascletà

Un infierno con sonido a mascletà

La seguridad del Abdi Ipekçi no logra identificar a los aficionados que lanzan los fuegos de artificio

J. C. V.

Viernes, 24 de octubre 2014, 00:52

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El Abdi Ipekçi no es la Plaza del Ayuntamiento ni en Estambul se celebran las Fallas pero ayer el Valencia Basket sufrió el sonido incesante de petardos de alta gama. Los hinchas de esa zona, más de 4.000, no dejaron de lanzarlos. Para desespero de la seguridad.

El Valencia Basket recopiló información de muchas fuentes para adivinar el ambiente que se iba a encontrar en el Abdi Ipekçi. Jugadores del Efes Pilsen incluidos. El conjunto de Ivkovic, aunque disputa sus partidos de Euroliga en el Sinam Erdem Arena, entrenó antes que el conjunto de Perasovic el miércoles por la tarde. Y, además de testar el nivel deportivo del 'Galata' en los últimos partidos, preguntaron por el aspecto que podían tener las gradas. La respuesta fue casi unánime, la afición del conjunto amarillo y rojo es tan constante como su equipo.

Los propios aficionados del Galatasaray tampoco lo tenían claro ayer por la mañana. LAS PROVINCIAS pudo charlar con una decena de ellos a primera hora por el centro de Estambul. La goleada del Dortmund en Champions al equipo de fútbol, que tuvo como previa lamentable el ataque de ultras turcos a aficionados alemanes en varios barrios de la ciudad, enfriaron las ganas de una afición tan pasional como fiscalizadora cuando los resultados no salen.

Dos horas antes del comienzo del partido, el tren que conecta el barrio de Galatasaray con el pabellón ya comenzó a transportar a centenares de hinchas. «Es un buen termómetro para saber si el ambiente va a ser caliente», comentó un empleado del club turco cuando el Valencia Basket saltó a calentar bajo una intensa pitada de unos dos mil aficionados. En este histórico recinto, España ganó un bronce en el Eurobasket de 2001, la primera medalla de la generación dorada en edad senior.

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