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Emociones, sensaciones, sentimientos. Instantes vividos y otros arrancados a imágenes tomadas con la cámara. Todo, transformado en verso, ha dado a la poesía el libro 'Pérdidas y ganancias. Recuento de los años huidos'. Es el estreno de Julián Quirós (Guareña, 1969), director del diario ABC y exdirector de LAS PROVINCIAS, en la literatura lírica. Quirós ha salido de esa 'Sala de máquinas' desde la que cada día en las páginas de ABC –antes semanalmente en las de este periódico– disecciona la realidad con ojos y palabra de periodista. Ahora la mirada es otra. La de un poeta que es, aunque nunca hasta ahora había dado a los lectores esos versos tejidos negro sobre blanco que ya llevaba años hilvanando.
La obra se despliega sobre el paisaje del 'Ayer', de un 'Antes de ayer' y del 'Mañana' para cerrarse con un 'Epílogo' de palabras recientes. Quirós perfila un autorretrato a partir del reencuentro con la tierra que le vio nacer, con el origen; el divertimento de la juventud y el noble compromiso de ser padre. Y se completa en ese cierre que recoge la «crónica periodística lírica», como Quirós define el recuerdo a María José Grimaldo, subdirectora de LASPROVINCIAS fallecida en 2018 a los 48 años. «Es ella. Se le reconoce. He hecho las paces con Majo. Tenía que aceptar su desaparición tan trágica, que no hemos olvidado ni olvidaremos. Tenía que hacer las paces con ella para aceptar la realidad. De alguna manera al ponerlo por escrito, descansé».
La mayor parte de los poemas de este balance de vida, 'Pérdidas y ganancias', están escritos entre los años 2008 y 2009, «cuando volví a Extremadura, a mi tierra. Fue un regreso a las raíces. Entonces, volví a escribir después de 15 años». Fue el momento de «mirar atrás, a la infancia. Y tenía además a mis hijos muy pequeños. Me miraba a mí y al mismo tiempo veía a mis hijos». En 2012 surgieron nuevos poemas, los cuatro primeros. Las dos composiciones más recientes, el epílogo, llegaron en 2019.
No todo es biográfico. La mayor parte sí, pero algunos poemas surgen de momentos recogidos con la cámara de fotografíar. Vivencias al fin y al cabo. Sensaciones del autor que plasmadas en versos regalan una poesía limpia, de encuentro con la fugacidad del tiempo, de los años huidos. Pero, que nadie piense que se trata de una lectura cargada de nostalgia. No hay lugar para el pesimismo. Se trata de poner las cosas en su sitio. «Es la celebración de vivir, con los problemas que comporta la vida, de afrontar las historias y superarlas», afirma Quirós para concluir que es un retrato de «la aceptación» por parte de alguien que en los primeros versos de su último poema se muestra agradecido al confesar: «Tengo un ángel de la guarda / desde que me hice hombre...».
Son versos «transparentes, diáfanos. No quería ocultarlo. Hay fórmulas para hacerlo, pero no he querido. Me parece que así hay más autenticidad». Leído el poemario, nada sorprenden los dos calificativos con los que Julián Quirós lo describe. No hay duda. El libro publicado bajo el sello Ars Poética es hijo de la reflexión. Es la introspección a la que un periodista ha acudido en los momentos que se ha podido permitir «al perder la tensión del día a día del periódico», recalca.
Podría haber acudido a cualquier otro género, pero se detuvo en la literatura en verso: «Me gusta mucho porque es un lenguaje alternativo al del periodismo y al mismo tiempo complementario porque supone utilizar un lenguaje radicalmente diferente», aclara Quirós. Ni siquiera en la poesía social se ha detenido porque afirma que le «dice poco, me parece demasiado pegada al periodismo, me lleva a él».
La lectura de 'Pérdidas y ganancias. Recuento de los años huidos' lo deja claro. Son versos intimistas que reflejan a un periodista, que acostumbrado a vivir rodeado de las prisas del oficio y a retratar con su prosa la realidad social que le ha tocado en suerte, ha decidido sacar a la luz su otra palabra, la que nace de dentro. Y por si queda alguna incógnita por despejar, basta comprobar que el libro se abre con el verso de Pessoa que recuerda que «Cada uno es mucha gente», y los del Nobel español Juan Ramón Jiménez manifestando el deseo de «Que nada me invada de fuera, / que sólo me escuche yo dentro». Pues hacia ese adentro poético ha dirigido ahora la mirada el periodista Julián Quirós.
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