De vuelta al talego

Después de convencer a los directivos estadounidenses del canal de que había que apostar por esta historia, la división española de FOX y Globomedia han levantado una nueva prisión en Navalcarnero (Madrid), la Cruz del Norte. El ambiente es más opresivo, oscuro y violento, como pretende serlo la tercera temporada. En esta ocasión, las reclusas son trasladadas a una nueva cárcel donde ya no están en lo más alto de la pirámide alimentaria. Ahora manda la mafia china, hay una exconcejala de Leganés acusada de corrupción y los guardias se conocen mejor los trucos.

«La tercera temporada es muy oscura, el ambiente está más cargado en la cárcel nueva, hay más tensión, con un aroma de sangre constante», explicó ayer Alba Flores a este periódico, en la puerta de su celda, donde han tenido que instalar una estufa porque las temperaturas rozan los cero grados a primera hora de la mañana. Sale vaho de su boca mientras responde a las preguntas y uno se imagina lo duro que está siendo el rodaje en pleno enero. «Esto es la Cruz del 'Polo' Norte», bromea.

Además de los nuevos fichajes, como los de Zaira Pérez o Itziar Castro, la incorporación más esperada ha sido la de Maggie Civantos, verdadera protagonista de 'Vis a vis' junto a Nwaja Nimri. La actriz malagueña está rodando actualmente la tercera temporada de 'Las chicas del cable' para Netflix y su presencia en la serie de FOX estaba en el aire. «Se han publicado muchas cosas, que solo iba a estar en los dos primeros capítulos o que no iba a estar directamente. Pero sin adelantar detalles, la salida de mi personaje no está tan clara. Macarena va a estar el tiempo que haga falta», añade ella.

Aunque la audiencia de la serie en Antena 3 no fue del todo satisfactoria para el canal -se despidió con un 14,2% de 'share' y 2.431.000 espectadores de media-, la venta de 'Vis a vis' a la BBC y a Netflix generó un interés internacional por la serie, además del que ya existía en nuestro país. Cuando se canceló, numerosos seguidores en Latinoamérica y España, autodenominados 'marea amarilla' por el color del traje que visten las presas, consiguieron con sus mensajes en las redes sociales que fuera el tema más comentado durante varias semanas. «Ha sido la marea amarilla la culpable del regreso de la serie, ni más ni menos. Como dijo el personaje de Zulema en el último episodio, 'solo muere quien es olvidado'», reconoce orgulloso el director, Jesús Colmenar.