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Ricardo Bellveser: «A la prometedora cultura valenciana le emborrona el excesivo nacionalismo»

Ricardo Bellveser: «A la prometedora cultura valenciana le emborrona el excesivo nacionalismo»

El poeta y periodista, exvicepresidente del Consell de Cultura, acaba de presentar su último libro 'Estanterías vacías'

Noelia Camacho

Valencia

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Lunes, 14 de diciembre 2020, 00:28

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Hace unos días, el poeta, ensayista y periodista Ricardo Bellveser recibió un merecido homenaje en el Ateneo Mercantil de Valencia. Era uno de tantos que le han rendido tributo en los últimos tiempos. Además, acaba de publicar 'Estantería vacías', un poemario en el que vuelca su mejor producción literaria. Exvicepresidente del Consell Valencià de Cultura (CVC), Bellveser puede como pocos intelectuales radiografiar el estado actual del sector en la Comunitat.

–¿Qué cuenta 'Estanterías vacías'?

–Nace de que hace un tiempo me deshice de parte de mi biblioteca, doné más de ocho mil libros y sólo me quedan dos mil. También de Oscar Wilde, de Borges, quien decía que la biblioteca es la única eternidad que tenemos. De Franklyn, que aseguraba que un libro es donde el que ha muerto habla con los que no han nacido. Este poemario ahonda en la salida de mis libros, de ese fin de la eternidad, de la vida misma. ¿Qué es vivir sino leer?

–¿Qué encuentra Ricardo Bellveser en la poesía?

–No entiendo la vida sin ella. Siempre he encontrado en la poesía el aliento que necesitaba. Para mí lo es todo. Pessoa dice que el poeta es un fingidor, que finge hasta el dolor que de verdad siente. Pero yo no comparto esa idea. Creo en la poesía-verdad.

–Hace unos días recibió un emotivo homenaje en el Ateneo Mercantil a toda su trayectoria, vital y literaria. ¿Le ha obligado a echar la vista atrás? ¿Qué siente ante tales reconocimientos?

–Antes ya me hicieron un homenaje en el Ateneo Republicano Blasco Ibáñez. Luego el del Ateneo Mercantil y después en la Federación Poética La Platea. Desde pequeñas asociaciones a otras republicanas, he recibido el cariño de todos ellos. En un mes, además, se publica la tesis que José Antonio Olmedo ha hecho sobre mi poesía. Estoy absolutamente abrumado del cariño que he encontrado, de todas las partes y de tantos amigos.

–Conociéndole, tendrá en manos muchos proyectos...

–Sí. Sigo colaborando con suplementos literarios. Yo sólo opino de culutra. Y sigo escribiendo. Tengo dos proyectos de edición en Bolivia y Chile. También, otro libro que voy a publicar próximamente sobre cómo murieron los escritores que más admiro como Wilde, Byron, Proust... Me interesa los últimos minutos de su vida, los que pensaron y vieron.

–Usted ha sido vicepresidente del Consell Valencià de Cultura (CVC). ¿Cómo radiografía el estado actual de la cultura valenciana?

–Es altamente prometedora pero le emborrona el excesivo nacionalismo. Es algo que me produce fastidio, que tenga esa sombra del nacionalismo excluyente. Suele repudiar a los autores que escriben en castellano. Y claro que está Fuster, pero también Brines, a quien le han dado el Cervantes. En general, el sector castellano de la cultura valenciana admite al sector nacionalista, lo comprende, pero a la inversa a veces no sucede lo mismo. Hecha esa excepción, en la poesía la situación no se puede mejorar. En cómic, en diseño... El momento es espléndido.

–Aún así, siempre hay que pedir más apoyo a la cultura...

–Hay quien dice lo de la cultura subvencionada y yo les pregunto ¿qué sector no está subvencionado? ¿Las obras públicas, el metro, la minería o la agricultura no lo están? Son ganas de desacreditar la cultura y considerarla un bien innecesario. Eso es un error.

–¿Qué lecciones nos ha dejado la pandemia?

–La primera, el regreso a la soledad de las personas, a mirarse hacia adentro. Y la segunda, la vulnerabilidad. También, que una ciudad o territorio sea acotado. Eso es medieval y está ocurriendo en pleno siglo XXI.

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