La pintora valenciana que la Tate de Londres fichó con 69 años
Isabel Oliver, presente en la colección permanente del Reina Sofía, lamenta que la Generalitat «nunca» le haya comprado obra
En 1996 el escritor Camilo José Cela recibió el Premio Cervantes, galardón que llegó a sus manos cuando ya disfrutaba del Nobel de Literatura (1989). ... Durante su discurso en la Universidad de Alcalá de Henares pronunció una contundente frase que quedó grabada en la memoria colectiva: «En España, el que resiste, gana».
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Pues, salvando todas las distancias, parece que a la artista Isabel Oliver (Valencia, septiembre de 1946) ha podido ocurrirle algo parecido. Cuando cuenta con reconocimientos más allá de la Comunitat, sigue resistiendo –cuatro décadas de trayectoria– y «trabajando más que nunca», con 75 años ya cumplidos. Pero, eso sí, esperando aún que la tierra que la vio nacer abrace su obra.
La creadora avanza con «la impresión de que Valencia no quiere a sus artistas. Cuesta mucho. Los creadores tienen que venir ya consolidados de otras partes, para hacerles un poco de caso». Aunque confiesa que no le gusta lamentarse, no oculta que se siente «rechazada, olvidada, en Valencia, desde luego».
«Tengo la impresión de que Valencia no quiere a sus artistas. Tienen que venir ya consolidados de otras partes», sostiene
Tuvo que ser Londres, de la mano de la Tate Modern, la ciudad que rescató del olvido a una artista que entregada al arte pop imprimió e imprime el lenguaje feminista en la pintura, y de quien poco se habla en parajes valencianos.
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En 2015, el mismo mes que Isabel Oliver alcanzaba 69 años, la Tate Modern inauguró una exposición en torno al arte pop que contó con cinco obras de la creadora valenciana. «Vinieron a mi estudio a buscarme». Y añade: «Si me eligió la Tate y se llevó cinco cuadros para una exposición colectiva, creo que sería por algo». El germen del revelador viaje a orillas del Támesis también lleva nombre de mujer. «Una de las primeras que empezó a contar conmigo fue Isabel Tejeda. Organizó como comisaria una exposición en el Centro Conde Duque de Madrid a la que se llevó obra; luego se hizo otra muestra sobre artistas feministas que mostró piezas mías», apunta la pintora.
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Las dos citas dieron como fruto catálogos «con estudios muy serios» en los que la Tate encontró la pista para el fichaje de la valenciana. Tuvieron que llegar foráneos para sacar a la luz un nombre que llevaba ya décadas entre pinceles. A Isabel Oliver no parece sorprenderle: «Eso ha pasado a los artistas siempre. Se tienen que ir».
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El británico debió ser un buen empujón. Dos años después, el Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía colgó de sus paredes obra de Isabel Oliver en el apartado 'Fuera del canon'. Allí sigue. Y de qué manera. La pinacoteca de la madrileña calle de Santa Isabel ha remodelado sus salas y la creadora valenciana forma parte de la colección permanente. Es fija en un museo de referencia internacional. También la prestigiosa colección del Banco de España atesora piezas de una artista que ha mostrado su obra en Niza y la ciudad alemana de Kiel.
¿Y qué pasa en Valencia? El IVAM es el único museo de titularidad pública que guarda pinturas de Isabel Oliver. En distintas ocasiones, como la propia creadora relata, las obras han salido de los almacenes para mostrarse en exposiciones. Está en la pinacoteca valenciana, pero a diferencia del Reina no «formo parte de la exposición permanente, bueno también es un museo distinto». Encontrar más junto al Turia implica acudir al ámbito privado y adentrarse en la Colección Martínez Guerricabeitia.
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«Trabajo más que nunca», afirma Isabel Oliver, que acaba de inaugurar una exposición en Elche
Se puede pensar que ahora, ya muchos años después de que aquella joven pintora a quien Equipo Crónica le prestó su estudio para trabajar cuando ella empezaba, la colaboración británica y la consolidación de su trabajo en la colección permanente del Reina Sofía, tal vez sirvan para animar a galerías e instituciones valencianas a contar con ella. La artista parece no verlo muy claro: «Después de haber estado en la Tate, estar en la colección permanente del Reina desde 2017, exposiciones en el IVAM, que ninguna galería haya dado un paso adelante a mí me da mala espina».
Lo cierto es que la creadora que se lanzó a la pintura pop para hablar de feminismo, «cuando en España no se podía ser feminista», brilla por su ausencia en la «colección de la Generalitat». No le han comprado obra «nunca». ¿Por qué? «No sé el motivo», pero lo que sí sabe es que «no es lógico».
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Mientras algunos miran a otro lado, ella, que nunca se cansó; que siempre siguió adelante, en estos momentos muestra su obra, desde el pasado día 1, en la Universidad de Elche comisariada por Isabel Tejeda. «He continuado las series 'De profesión sus labores', 'Memoria', 'Recintos privados, recintos públicos'. Casi todo es obra nueva. Estoy trabajando más que nunca», señala.
Lo afirma el saber popular: no hay mejor juez que el tiempo. Isabel Oliver lo dice con otras palabras: «Imagino que el tiempo pondrá a cada uno en su lugar».
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