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Una de las 66 viñetas de Forges que la muestra que el CSIC ofrece hasta el 31 de enero R.C.
Forgendros científicos

Forgendros científicos

Una muestra repasa en 66 viñetas la rica, intensa y divertida relación del Forges con el mundo de la ciencia y la tecnología

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Martes, 5 de noviembre 2019, 17:57

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Nada humano le era ajeno a Antonio Fraguas de Pablo (1942-2018), Forges para el mundo, que durante medio siglo nos hizo carcajearnos y llorar contándonos en sus viñetas qué pasaba en el mundo y en nuestras propias cabezas. De intereses enciclopédicos, este singular dibujante para quien el humor era «la respiración del cerebro», fue especialmente sensible a lo que acontecía en el mundo científico y tecnológico. A los hallazgos, logros y decepciones de los investigadores hacia los que demostró siempre una especial empatía. Queda muy claro en la muestra 'La Ciencia según Forges' con la que el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) homenajea al prolífico, lúcido, mordaz y descacharrante humorista fallecido el año pasado repasando un cuarto de siglo de su trabajo visto con un prisma 'científico'.

El CSIC rinde homenaje al descacharrante y mordaz humorista gráfico con la exposición que recorre la segunda mitad de su carrera

«El humor es una potente y eficaz herramienta científica; le quita hierro al asunto y nos permite acercarnos a la ciencia sin miedo», asegura Fernando del Blanco, comisario de la muestra para la que ha seleccionado 66 viñetas, 'Forgendros científicos' los habría llamado su autor, datadas entre 1995 y 2018 y distribuidas en siete secciones. Incluye la última que Forges publicó en El País, el 23 de febrero de 2018, y en la que nos advierte que «la piedra es el único objeto inanimado capaz de tropezar dos veces con el mismo humano».

Con su humor acerado, crítico, tierno e inteligente se ocupa Forges del cambio climático, del descubrimiento del bosón de Higgs, de los aceleradores de partículas, los agujeros negros, la pérdida de biodiversidad o de la emergencia de las nuevas tecnologías. De la 'pantallitis' y de la obsesión por las redes sociales que le lleva a resumir el Quijote en un tuit firmado pro don Miguel de Cervantes. No faltan Arquímedes, Newton, Darwin o Einstein.

Viñeta de Forges
Viñeta de Forges R.C.

«Son muchos los temas conectados con la ciencia que Forges plasmó de forma recurrente en sus viñetas. La curiosidad de su mente era inagotable y capaz de casar ciencia, actualidad, política e inquietudes sociales. Su mirada era global», apunta el comisario de esta muestra, en cartel hasta finales enero en la sede del CSIC en Madrid, y que viajará luego por España.

Empatía

La viuda de Forges, Pilar Garrido, hizo en la presentación un divertido y emotivo retrato de un dibujante interesado por los cachivaches y las teorías científicas. «Veía los problemas de las personas, de los políticos y de los científicos y conseguía que los demás tomáramos conciencia y empatizáramos con ellos», aseguró. Muy consciente de que en nuestro país investigar ha sido casi siempre sinónimo de llorar, Forges reivindicó además en sus dibujos y textos la necesidad de más recursos para una ciencia española de calidad. «No conozco ningún centro o laboratorio en el que no haya una viñeta de Forges que aluda a su trabajo», hace notar Fernando del Blanco.

La muestra es un recorrido gráfico por el pasado, el presente y el porvenir de la investigación. «Trata de ser una ventana a la divulgación, a la curiosidad y a un mejor conocimiento público de lo que desde la ciencia y la investigación se ofrece a la sociedad», dice su comisario, que ha incluido un código QR legible con el móvil junto a cada viñeta, lo que permite al espectador profundizar en el tema que aborda el dibujante.

«Forges hacía humor de la vida cotidiana y en ese gran contenedor que es la vida incluía la ciencia y la tecnología», dice Fernando del Blanco, bibliotecario e investigador del CSIC que produce esta exposición con motivo de su 80 aniversario.

Viñeta de Forges
Viñeta de Forges R.C.

«Respiramos con los pulmones, pero el humor es la respiración del cerebro, y quienes nos dedicamos a esto no lo dejamos nunca. Así que seguiré haciendo humor hasta el final». Forges cumplió esta promesa hecha cuatro años antes de su muerte, al recibir el Premio Iberoamericano de Humor Gráfico Quevedos.

Madrileño, hijo de catalana y gallego, comenzó con catorce años a trabajar en Televisión Española. Se despidió en 1973 para dedicarse profesionalmente al humor gráfico. Publicó su primer dibujo en 1964 en el diario Pueblo, para pasar luego a Informaciones. En 1970 comenzó a colaborar en Diez Minutos y en las revistas de humor Hermano Lobo, Por Favor y El Jueves. Tras dibujar en Diario 16 y El Mundo, en 1995 empieza a publicar el chiste diario en El País, donde culminó su carrera.

En 1972 publicó su primer álbum, 'El libro de Forges'. Autor de decenas de miles de viñetas, innumerables seriales y monografías, en su obra ocupan un lugar fundamental el costumbrismo y la crítica social. Parte sustancial de la misma fueron los álbumes sobre historia de España y sobre informática para torpes. En 1992 publicó su novela 'Doce de Babilonia'. Dirigió dos películas –'País S. A.' (1975), y 'El bengador gusticiero y su pastelera madre', (1977)– y cuatro series de humor en la televisión: 'El Muliñandupelicascarabajo' (1968), 'Nosotros' (1969) y '24 horas aquí' (1976), en TVE, y 'Deformesemanal' (1991), en Telemadrid. En 2014 RTVE comenzó a emitir el programa 'Pecadores Impequeibols'.

Ficha

  • Qué: La Ciencia según Forges

  • Cuándo: del 5 de noviembre de 2019 al 31 de enero de 2020

  • Dónde: Edificio central del CSIC. Calle Serrano, 117. Madrid

  • Cuánto: Entrada libre

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