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Ficha como puedas

INÉS HERRERO

Martes, 14 de mayo 2019, 08:02

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Con soluciones de última hora y una buena dosis de dudas e improvisaciones, se acaba de estrenar la obligación legal de llevar un registro de jornada diaria en todas las empresas. Resulta cuando menos llamativo que, a estas alturas, la solución a todos los males de un mercado laboral que aspira a ser flexible y conciliable con la vida familiar sea que todos los trabajadores fichen a la antigua usanza, con tarjeta o apuntando de su puño y letra la hora a la que empiezan y acaban de trabajar.

Explica el Gobierno central en el real decreto-ley que impone esa exigencia, en vigor desde marzo pero exigible desde el pasado domingo, que la introducción del control diario «debe contribuir a corregir la situación de precariedad, bajos salarios y pobreza que afecta a muchos de los trabajadores que sufren los abusos en su jornada laboral».

Para «justificar la extraordinaria y urgente necesidad» de implantarlo por decreto-ley, el Ejecutivo de Pedro Sánchez señala que un 35% de incumplimientos empresariales en materia de relaciones laborales denunciados ante la Inspección se referían al tiempo de trabajo y que, según la EPA, casi la mitad de los asalariados que declaran realizar horas extraordinarias aseguran que ni las cobran ni cotizan por ellas.

Con esos argumentos, dio dos meses a las empresas para decidir cómo llevar sus registros, sin publicar la prometida guía pública hasta que expiró el plazo, y en tono de fingida sorpresa por el incumplimiento generalizado de una medida recibida como «una carga más». Ante la dificultad de fichar en el campo, la obra, en casos de teletrabajo, comerciales, instaladores y hasta 60.000 negocios valencianos que carecen de centro de trabajo -según ATA-, entre los pocos que celebran la medida destacan los responsables de las aplicaciones móviles creadas para la ocasión.

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