LOS ERRORES EN AMBAS ÁREAS NOS CONDENAN

No lo tenía fácil el VCF, un equipo, el nuestro al que en ocasiones le cuesta defender, evitar que los rivales controlen el juego y tengan más la pelota. La referencia debía ser el Nuevo San Mamés, acertados y precisos en la posesión y escasa concesión de oportunidades al rival. No comenzó el partido de forma demasiado positiva. Ellos demostraban de lo que eran capaces con la pelota en los pies, jugando en campo contrario, recuperando rápido y acercándose peligrosamente al área. Y lograron el primero, gran gol de Zyech, aunque dio la sensación de que Cillessen pudo hacer más, a pesar del preciso disparo del jugador del Ajax. Pero la cosa fue cambiando con el paso de los minutos, rápidamente los futbolistas del VCF se dieron cuenta de que podían contragolpear con claridad. Al principio lo hicieron, pero sin acierto en los últimos 30 metros. Poco a poco fueron llegando de forma más peligrosa, algunas acciones terminaron ya con jugadores locales al borde del área rival. Y llegaron las oportunidades, y el penalti, y la pelota al palo de Rodrigo, y el mano a mano errado por Maxi. El VCF se puso el disfraz del equipo holandés, y supo jugar en campo rival, combinando bien, haciendo jugar a sus futbolistas de banda, encontrando a Rodrigo por dentro, y evitando que los visitantes llegaran a su meta. Hasta que llegó el segundo. Muy poca consistencia de Paulista, como casi siempre protagonista del, o de uno de los errores de futbolistas de nuestra zaga que acaban costando goles. Injusto resultado al descanso.

La segunda mitad que comenzó también de forma positiva. Un par de claras oportunidades pudieron hacer recortar diferencias al VCF, pero no se concretaron. El paso de los minutos acabó sentenciando a un equipo que lo intentó, y muy bien, durante sesenta o sesenta y cinco minutos, y terminó sucumbiendo ante la posesión del rival, y el cansancio propio.

La conclusión, marcador injusto tras una primera parte bien jugada por los nuestros, consecuencia de un muy buen juego en contragolpes y ataques posicionales, pero cometiendo errores en ambas áreas que lo condenaron. Se pudo iniciar la posible remontada si se hubiese logrado marcar, pero una vez no se logró, el cansancio y su lógica posesión remató el resultado final.