Borrar
Urgente Cuatro muertos, dos en Tarragona y dos en Asturias, por el temporal

Los antenistas

Si por un técnico llegó el mutismo, por otro ha de llegar la reencarnación. Y en eso está el Ente público ahora mismo

María José Pou

Valencia

Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.

Sábado, 10 de noviembre 2018, 09:47

Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.

Compartir

Esto va de antenistas. Si Canal 9 se apagó con Paco 'Telefunken', ahora su replicante quiere iluminar la Comunitat con un antenista que vaya sintonizando los televisores por todo el territorio. ¡La caravana Telefunken está en marcha! En aquella funesta noche de hace cinco años, Paco Signes, conocido en Gata de Gorgos como Paco 'Telefunken', fue el técnico de telecomunicaciones al que endosaron la ingrata tarea de 'apagar' la tele pública. Él se negó y se convirtió en una figura emblemática de la resistencia al apagón. De la noche a la mañana, literalmente, pasó a la historia como una suerte de 'Palleter catódico'. Por eso no es de extrañar que el regreso de Canal 9 desde los infiernos de la oscuridad y la irrelevancia quede ahora en manos de un antenista. Es justicia poética, pócima contra el maleficio o cierre de un círculo infernal que se inició con el negro en las pantallas. Si por un técnico llegó el mutismo, por otro ha de llegar la reencarnación. Y en eso está el Ente público ahora mismo, dispuesto a robar protagonismo a la caravana más importante de estas fechas casi navideñas: la de Papa Noel y sus renos. Si, como dice Ábalos, este gobierno no le hace ascos a poner peajes donde no los hay aunque prometa quitarlos donde las hay (si alguien lo entiende, que me mande un whatsapp), tampoco va a poner pegas para permitir que el antenista vaya de paquete en el trineo de Santa Claus con tal de que llegue a todas partes. A todas. Y quién mejor que el abuelo entrañable venido del Polo Norte para entrar en cada casa sin ser sospechoso, dejarnos el regalito del Canal 9 Plus y comerse lo que tenemos en el calcetín. El del salón y el de debajo del colchón como acaben aumentando el presupuesto del Ente para una audiencia similar a la de la Superbowl. Ya me estoy imaginando al antenista vestido de verde y subido a Rudolph, al que llamará Rodolf aunque necesite a Ada Colau traduciendo al de Laponia.

Lo mejor es que no solo van a lanzarse a la conquista de las pantallas sino que lo van a retransmitir. En directo. Retransmisión en directo de un antenista sintonizando una tele. Como se descuiden inauguran un canal de tutoriales en Youtube llamado 'Electrodomésticos para dummies'. Convertirán en programa la operación 'Sintoniza con nosotros' para confirmar nuestra adhesión a la tele oficial y contarnos las bondades de escoger la oferta de ocio institucional y no las prácticas antisociales de algunos recalcitrantes. Los antenistas son nuestros bomberos Fahrenheit 451, unos misioneros de la Buena Nueva que nos trae À Punt y que estamos en vísperas de conocer. ¡Aleluya! El Reino de los Cielos está cerca. Tan cerca como el mes de junio cuando se produzca el advenimiento del Botànic Premium. Los telepredicadores -nunca mejor dicho- nos invitarán a la conversión, siempre necesaria para preparar nuestro corazón a la acogida del mensaje salvador. Hágase tu voluntad.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios