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JAVIER MARTÍNEZ
Sábado, 10 de febrero 2018, 00:53
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valencia. El Juzgado de Violencia sobre la Mujer número 1 de Sagunto ordenó ayer prisión provisional, comunicada y sin fianza para el hombre detenido por arrojar a su expareja desde la tercera planta de un edificio. La víctima sobrevivió a la caída tras amortiguar el golpe el techo de uralita de un patio interior y reveló el nombre de su agresor a los sanitarios y bomberos que le prestaron auxilio.
El intento de homicidio tuvo lugar sobre las 21 horas del jueves en la vivienda donde reside la mujer de nacionalidad brasileña en la calle Padre Pellicer de Sagunto. La hija de la pareja, una niña de cuatro años, se encontraba en la casa y presenció los violentos hechos. José Luis S. S., de 34 años, se abalanzó sobre su expareja cuando salía de su domicilio para pasear a sus perros. La víctima logró zafarse y se refugió en la cocina, pero el hombre la empujó por la ventana.
La mujer sufrió un traumatismo craneal y estaba consciente cuando ingresó en el hospital. Tras montar un dispositivo de búsqueda, los policías de la comisaría de Sagunto localizaron y apresaron al individuo en menos de cinco horas en la pedanía valenciana de Benifaraig, donde varios agentes lo estaban esperando porque sospechaban que iba a esconderse en la casa de un amigo. Eran las dos de la madrugada cuando la policía lo detuvo.
Además de encarcelar al agresor, el juez le prohíbe entrar en Sagunto y acercarse a la víctima a menos de 500 metros, así como comunicarse con ella por cualquier medio, medidas de protección que ya estaban vigentes desde el mes de junio, cuando la víctima le denunció por malos tratos.
Respecto a la hija de cuatro años de la víctima y del agresor, el magistrado estimó la petición del fiscal y también acordó atribuir la patria potestad en exclusiva a la madre, que ya tenía la guarda y custodia de la menor, así como suspender el régimen de visitas del padre. El magistrado le imputa un delito de homicidio en grado de tentativa, lesiones y quebrantamiento de condena.
José Luis S. tiene una orden de alejamiento de su expareja en vigor desde el 28 de junio de 2017, después de que la víctima denunciara varios episodios de violencia ante el Juzgado de Violencia sobre la Mujer número 1 de Sagunto. En aquella ocasión, el juez le imputó un delito de malos tratos y le impuso la prohibición de residir o acercarse a Sagunto, tal y como solicitaron el fiscal y la acusación particular.
El magistrado convocó la vista en la que las partes pueden solicitar la prisión del detenido, pero ni la Fiscalía ni el abogado de la víctima lo solicitaron. De esta forma, si las acusaciones no piden cárcel para un presunto maltratador, el juez no puede acordarlo y el hombre quedó en libertad. Así, en su auto del mes de junio, el magistrado explica que aunque existen bastantes indicios «para estimar responsable criminalmente del delito de malos tratos en el ámbito familiar al detenido, al no haberse solicitado la prisión por ninguna de las partes, procede acordar su libertad provisional».
Cerca de 8.700 mujeres, entre las que se encuentra la víctima de Sagunto, reciben protección policial en la Comunitat Valenciana tras ser incluidas dentro del sistema de seguimiento integral en los casos de violencia de género (VioGén). La cifra es alarmante pese a los esfuerzos del Gobierno para combatir el denominado terrorismo machista.
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