La adjudicación de una jefatura de área desata la polémica en La Fe

El Hospital La Fe fue escenario de una protesta verbal en la que, según denunciaron testigos presenciales, se profirieron gritos solicitando la «impugnación» del proceso de adjudicación de la plaza de jefe de servicio de Microbiología de La Fe. Pero no sólo eso, también se oyeron voces que hablaban de «corrupción» y «tongo». A juzgar por el relato de uno de los testigos, eran al menos dos los aspirantes a la plaza: «uno de los más eminentes microbiólogos de España contra un licenciado en Medicina con un currículum paupérrimo, amigo del conseller Llombart».

Las evidentes muestras de desaprobación por el resultado de la selección se dirigieron contra los miembros del tribunal. Según la denuncia recibida por LAS PROVINCIAS la intensidad de la protesta llevó a que los presentes en la sala donde tuvo lugar el acto temieran «por la integridad del comité de selección» cuando el público, «unas 50 personas», comenzó a mostrar su descontento con la adjudicación de la plaza.

En ningún momento la Conselleria de Sanidad negó los hechos que sucedieron en el centro sanitario. El departamento autonómico reconoció que ante los acontecimientos está previsto que hoy los integrantes del jurado se reúnan para estudiar lo sucedido. Sanidad explicó que se decidió la celebración de este encuentro porque «el tribunal es consciente de la situación anómala que se vivió».

Desde la conselleria no confirmaron si en esta reunión se abordará la impugnación de la adjudicación de la plaza. No ofrecieron más explicaciones sobre el contenido de este encuentro al considerar que es una cuestión que corresponde exclusivamente al tribunal, que decidirá «las actuaciones que se llevarán a cabo». Sí que avanzaron que tras el encuentro se dará a conocer el resultado alcanzado.

En cuanto a las acusaciones de la vinculación del nuevo titular de la plaza con el conseller de Sanidad, Manuel Llombart, el departamento autonómico recordó que para la adjudicación de los puestos «existen unos criterios de baremación».

Autonomía del tribunal

Además, insistieron en que los tribunales «tienen autonomía de actuación y la Conselleria no influye en las decisiones que éste tome». A esta consideración añadieron que «ningún candidato tiene capacidad para elegir a un miembro del Tribunal».

En su respuesta a las preguntas en torno al tribunal y las acusaciones que se vertieron contra sus miembros, el departamento autonómico también apuntó que la «persona a quien se le ha adjudicado la plaza es el mismo que hasta ahora la estaba ocupando en una situación de interinidad». Además, puntualizaron que de lo que se trata ahora es de que la misma persona pasa a «ocupar la plaza en propiedad».

Fuentes consultadas por LAS PROVINCIAS apuntaron que habitualmente las adjudicaciones de un puesto suele recaer en quien lo ha estado ocupando con anterioridad. El proceso de adjudicación de una plaza comporta un acto en el que el o los aspirantes presentan una memoria de trabajo que tienen que defender ante el jurado.

La defensa comporta la exposición del trabajo y la respuesta a las preguntas que planteen los miembros del tribunal.

Entre el público que presenció los hechos que han desencadenado la polémica y provocado la celebración de una reunión del tribunal se encontraban jefes de servicio de distintos hospitales de la provincia de Valencia, tanto de centros sanitarios de la ciudad como de ámbito comarcal.