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Eva María Lahoz
Sábado, 12 de julio 2014, 00:33
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Los vecinos del bloque número 10 de la calle Diputado José Luis Barceló, en la barriada de Nou Alcolecha, han pasado su tercera noche sin electricidad, después de que la compañía les cortase el suministro el pasado miércoles.
Una decisión que ha molestado mucho al Ayuntamiento de Alicante y que hizo que ayer saltaran chispas entre la administración local y la empresa suministradora, Iberdrola.
La alcaldesa, Sonia Castedo, ha intervenido personalmente en este conflicto y ayer ordenó que se enviase un escrito a la compañía en el que le exige que se restablezca el servicio a las 55 familias afectadas.
Desde el Ayuntamiento de Alicante alegan que la empresa les engañó sobre sus intenciones cuando les informó la semana pasada de que quería acudir al bloque a realizar una inspección y pidió el apoyo de la Policía Local. «Nos dijeron que iban a revisar la instalación eléctrica para colaborar con nosotros en el proyecto de rehabilitación que tenemos previsto ejecutar con fondos europeos», explican desde el Patronato Municipal de la Vivienda. Sin embargo, cuando llegaron el miércoles al bloque, lo que hicieron fue «cortar la luz y denunciar a los vecinos», añaden, lo que ha molestado sobremanera al Patronato.
La situación es más complicada de lo que parece, ya que fue el propio Ayuntamiento el que instaló el suministro eléctrico a los vecinos hace tres meses, después de que los contadores se quemasen hace tiempo en un incendio y los residentes optasen por enganches «muy poco seguros».
Desde Vivienda explican que en todo momento se ha informado de la situación a Iberdrola y se ha contado con su beneplácito para «mirar para otro lado» en este caso, a cambio del compromiso municipal de solventar los múltiples problemas que tiene este bloque, no solo a nivel de suministro eléctrico.
La situación de este bloque es extremadamente compleja, ya que en estos momentos se encuentra prácticamente en ruinas, apuntalado y con pisos ocupados.
Vivienda ha elaborado un proyecto para rehabilitarlo y confía en que pueda disponer de fondos europeos para financiarlo a principios de 2015. «Entonces se aprovechará para regularizar todo», indican.
Iberdrola, dicen, conoce el proyecto y se ha reunido varias veces con técnicos municipales para evaluarlo y dar su beneplácito. El Ayuntamiento estuvo de acuerdo en la visita que realizaron el miércoles porque, asegura, dijeron que iban para revisar la instalación de cara a colaborar en la rehabilitación el próximo año.
Por eso no entienden que ahora la compañía haya decidido unilateralmente dar este paso de cortar el suministro. «No se puede actuar así, sin previo aviso, dejando a la gente sin luz, porque saben que no hay forma de restablecerlo legalmente en estos momentos, tal y como están las instalaciones», apuntan. «Saben perfectamente que al final se van a volver a conectar de forma ilegal y, además, insegura. Por encima de la legalidad está la seguridad», consideran.
Además, les ha molestado mucho que utilizasen a la Policía Local que asistió con ellos al bloque para levantar actas de denuncia contra los vecinos por fraude eléctrico. Unas actas que, aseguran desde el Consistorio, no van a ir adelante.
Sin embargo, desde Iberdrola siguen defendiendo que su intervención está totalmente justificada, dado que las conexiones eran ilegales.
Respecto a la exigencia por parte de la alcaldesa de que restablezcan el suministro eléctrico en el bloque, la compañía asegura que para ello tendrán que seguirse los pasos que establece la ley. «Los vecinos tienen que presentar la solicitud de ocupación, el boletín de instalaciones eléctricas y la liquidación del fraude», o sea, pagar por la electricidad consumida ilegalmente hasta el momento, señalan en la empresa.
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