El apoyo inicial del PSPV de Xàbia a la ampliación del puerto le ha costado las primeras dimisiones en el seno de un partido que apenas supera el medio centenar de afiliados. Y son personas del sector más activo de la formación.
El vicesecretario de la agrupación y consejero de Amjasa, Miguel Mata, el coordinador de Medio Ambiente en Juventudes Socialistas, Jordi Badenes, el delegado del partido en el Consell agrari, Reyes Abad y la miembro de la ejecutiva, Pepa Tormos. Junto a otros afiliados descontentos con el cambio de parecer del PSPV comparecieron ayer para mostrar su decepción en un asunto en el que, hasta la fecha, no había dudas.
"Me siento defraudada" admitió Briggite Troullez. "He ido como socialista a las manifestaciones en contra del puerto, a la Agenda 21 a defender el medioambiente y a los plenos donde mi partido votaba en contra de ampliar el puerto".
Algo parecido le pasa a Jordi Badenes, quien ha decidido abandonar la coordinación del medio ambiente en la ejecutiva de Juventudes Socialistas. "No puedo defender desde el y tratar de concienciar desde el socialismo a las personas para que preserven el medio ambiente cuando el partido no lo hace. Me parecería hipócrita". Porque Badenes está convencido que el puerto tendrá efectos nocivos en la Reserva Marina, al menos mientras duren las obras, ya que máquinas y barcos con material deberán cruzar la zona restringida.
Por su parte Miguel Mata, recordó que desde que las empresas empezaron a presentar proyectos portuarios "siempre me he aferrado al no". Una opinión que ahora tiene más sentido aún porque Duanes "es la única seña de identidad que le queda a Xàbia, después de lo que está pasando en el pueblo". Mata no se deja engañar "porque nos digan que habrá 250 plazas de aparcamiento. Ahora ya las hay y son gratis".
Y es que al grupo no les convence ni la forma que tiene la Conselleria de presentar el proyecto portuario, ni que se venda como iniciativa pública lo que va a ser una concesión al sector privado. "La Conselleria tiene muchos millones para organizar una visita del Papa, para crear circuitos de Fórmula 1 pero para las cosas que afectan a la gente dejan que sean las empresas privadas las que se encarguen de pagarlo y después que privaticen el puerto", señaló Jordi Badenes.
El grupo de descontentos ya avanza que seguirán secundando con convicción las manifestaciones que se convoquen contra el puerto. Y la comparecencia fue en una cafetería porque la ejecutiva socialista no les permitió que usaran la sede del partido, algo que lamentaron.
Pero desde la secretaría del partido, Pepa Gisbert señaló que ni siquiera había solicitado permiso para usar la casa del Poble pero añadió "que no podemos autorizar el uso de la sede oficial cuando no sabíamos ni lo que iban a decir ni hablaban en nombre de la ejecutiva"
Gisbert compareció arropada por unos 15 afiliados para mostrar su disgusto por que algunos compañeros "estén vendiendo que ejecutiva y las bases del partido estamos enfrentados y además hayan insinuados coacciones o falta de libertad a la hora de tomar una decisión democráticamente".
Porque Gisbert aseguró que la votación fue "libre y transparente" en una asamblea "convocada en tiempo y forma legal". La secretaria del partido recordó que es la afiliación quien decide todas las cuestiones importantes y que, después "coincida con lo que uno piensa o no todos defendemos a una lo acordado por encima de intereses u opiniones personales".
Al respecto invitó a quien crea que su parecer es mejor que lo que ha votado todo el partido "a darse de baja e irse a otro sitio" y avanzó que se abrirán expedientes disciplinarios para expulsar a aquel que "arremeta y perjudique al partido".
La asamblea socialista ha tomado otras decisiones "con posturas divergentes", como acordar suscribir el pacto de gobierno con Bloc Centristes. Un acuerdo que el PSPV confía no se tambalee por las discrepancias respecto al puerto. "Somos partido diferentes y no coincidimos en algunas cosas pero eso no tiene por qué afectar al trabajo diario que cumplimos en el Ayuntamiento", indicó el edil José Chulvi.